Mostrando entradas con la etiqueta BSO. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta BSO. Mostrar todas las entradas

09 octubre 2024

La lectora (1988)

 




Una persona importante y valiosa en mi vida ahora mismo, me hizo retomar el hábtio de la lectura que tenía olvidado hace mucho, así que esta película me pareció una buena forma de darle las gracias anónimamente.

Después de que me contara los libros que se iba leyendo, decidí que era momento de quitar tiempo a otras actividades y dedicarle un rato a la lectura, que aunque muchas veces y a mucha gente le pueda parecer aburrido, realmente es algo enriquecedor, por ejemplo ayudando a enriquecer la mente o para liberar la imaginación.

Cuando empecé a trabajar allá por 2002, siendo un chaval, los trayectos en tren hasta el trabajo me llevaban más de una hora, así que un poco por imitación, me empecé a comprar libros para ir leyendo durante el trayecto de ida y vuelta al trabajo ... siempre que el sueño y el cansancio me lo permitiera.

Además no empecé por libros pequeños, ya que recuerdo libros de hasta 1000 páginas, y de aquella época guardo buen recuerdo de Los Pilares de la Tierra, La Ciudad de los Prodigios o Las Cenizas de Ángela.

Esta persona y yo tuvimos vidas relativamente paralelas, coincidimos en una clase en el último año de instituto, pero nunca llegamos a hablar, y luego empezamos de manera relativamente parecida nuestras carreras laborales y con ésta misma actividad durante nuestros trayectos. Además estuvimos trabajando muy cerca en varias ocasiones sin ni siquiera saberlo.

Eso sí, mi afición por la lectura se terminó rápido, y es que los viajes al trabajo se me hacían muy pesados, y en 2005 me compré un coche y por tanto se acabaron los libros, mientras ella siguió con su buen hábito y lo ha conservado hasta día de hoy.

Así que cuando por fin la conocí, además de darme cuenta de que era una gran persona me hizo concienciarme en recuperar la lectura.

Y así cuando conseguí esta película me pareció una bonita forma de celebrar lo afortunado que me siento de conocerla.


Aunque la película como tal no se parezca en mucho al concepto de lector, en silencio y en soledad habitualmente, y nos introduce la original idea de una persona que se dedica a la lectura en voz alta y para otras personas haciendo de ello una profesión ... imaginaria evidentemente, porque no conozco que en realidad haya un trabajo así.

No me importó mucho que se tratara de una película francesa, totalmente desconocida para mi, sin ni siquiera algún actor que me sonara, y es que últimamente le he cogido gusto y valoro las películas de otros países, más allá de las más habituales americanas y británicas, y teniendo especial afición por las australianas, las italianas, y ahora también las francesas, que me han demostrado con variedad de estilos y calidad de las mismas que son perfectamente visionables.

Hay varios detalles de la película, más allá de la impresión general, que me han gustado de la película.

- Uno de ellos, bastante despercibido para alguien que no sea francés, que me ha gustado especialmente de la película, es la localización de la misma. Rápidamente me di cuenta de que yo había estado allí, y que estaba casi seguro que era la ciudad de Arlés. Más por el entorno del río Ródano, que por su famoso anfiteatro (o arénes en francés), que salen muy de refilón en alguna escena de la película.

- Otro fue la diferente música de la película. Igual si no te fijas al principio, en los títulos de crédito, luego no eres capaz de darte cuenta, pero en los créditos pone a Ludwig Van Beethoven como el autor de la misma. Esa música da una sensación de libertad y felicidad impresionante.

- Y esa bonita y diferente música, junto con las callejuelas en las que se rueda, desiertas de gente, que me recuerdan un poco al lugar de rodaje de la serie del duende Pumuky (aunque sea a muchos kilómetros de distancia un sitio de otro), es el tercer detalle que me pareció bastante agradable y acertado.


Por lo demás la película, que en líneas generales debería ser una comedia (aunque tiene calificación R, que entiendo que en aquella época significaba Restrigida, supongo que a menores de 18 años), mezcla adecuada y acertadamente, pasajes con tintes dramáticos, cómicos, absurdos y hasta picantes o eróticos para rematar un buen producto, muy bien valorado en IMDb por lo que veo

Es una película bastante inteligente y poética, con diálogos brillantes y secuencias ingeniosas en las que el placer de las palabras se une al placer de las imágenes.

A mi sin apasionarme, me ha gustado por su originalidad y frescura, aunque me parezca un poco rompecabezas, y por esa historia inicial que os he contado, que me ha llevado a verla y comentarla como agradecimiento a una persona, y que posiblemente sin ella no habría reparado ni dado la oportunidad hasta película.

Además lo que evoca la historia, que no deja de ser una ayuda a personas desfavorecidas principalmente, también representa una de las actividades que intentamos llevar a cabo esta persona, yo y otro grupo de gente, de ir a visitar a gente mayor, enferma o sola, aunque no sea para leerles, si para acompañarles un rato e intentar que por un momento la vida sea diferente, más amable y bondadosa.

La lectura debe conservarse en una sociedad en la que los libros ocupan un lugar cada vez menos importante.

Probablemente no sea para todo el mundo, pero si te gusta una película sutil, suavemente divertida, culta y poco convencional, entonces dale una oportunidad.









Valoración:                              6/10













15 junio 2024

El campeón del videojuego (1989)

 





Tuve la fortuna de toparme con otra película que me resultó francamente terapeútica, en este transitar de días monótonos y rutinarios presididos por mi gran cansancio, así que es de agradecer uno de estos momentos de evasión.

El caso es que la tenía reflejada con dos títulos diferentes en mi base de datos, una como El pequeño mago, que si la tenía resaltada con el color que marco las que quiero ver, y otra con este título, El campeón del videojuego, queno la tenía marcada entre mis prioritarias.

De hecho la traducción del título de la película en otros idiomas es de lo más variopinta e incluyen

"Joy Stick Heroes" (Alemania), "Sweet Road" (Japón), "The Wizard of Videogames" (Italia y Brasil), "Videokid" (Francia), "The Champion of Videogames" (España), "Gameboy" (Suecia), "Game Over" (Finlandia), and "The Child Genius" (Canadá).


Como las películas de magia me gustan decidí ver la que tenía como El pequeño mago, pero resultó ser una película de dibujos animados española, concretamente ésta. Así que tenía dos opciones ponerme a ver otra, ya que parecía que no era una película de magia como yo esperaba, o rebuscar esa otra versión que tenía a ver si era la correcta y darle una oportunidad a la película.

Quizás, viendo sobre todo el número de votos que tiene la película en la web de referencia IMDb, parece que puede no ser una película muy apropiada o que cumpla el propósito del blog, pero no recuerdo que la hubieran pasado nunca en mi infancia, y menos ahora en la actualidad, y tampoco tenía muchos  votos cuando la incorporé a mi base de datos, con lo que posiblemente sean principalmente espectadores americanos, donde parece ser que es una película de culto y dio pie a torneos de juegos, y pienso que en España seguirá siendo poco conocida ... o no.

Evidentemente, hoy que se puede conseguir casi cualquier película con relativa facilidad, puede ser que los admiradores de Fred Savage, que rodó la película a la vez que hacía Aquellos maravillosos años, aprovechando su increíble éxito, o los seguidores de Christian Slater, en España, hayan visto multitudinariamente la película ... aunque pienso que los que principalmente lo habrán hecho, si es que conocen el detalle, serán los poseedores y jugadores de la consola Nintendo NES, que es donde reside la magia de la película para mi.

Dos actores que alcanzaron la fama muy pronto, Fred Savage como he dicho anteriormente gracias a la serie de televisión, Aquellos marvaillosos años (con su inolvidable canción), y Christian Slater de la mano de El Nombre de la Rosa, junto a Sean Connery.
Slater ya estaba consolidado en el cine, y venía de rodar dos películas más que he comentado aquí en el blog, Más allá de las estrellas y Al filo del abismo.

Junto a ellos destaca la presencia de Beau Bridges, hermano subestimado de Jeff, e hijo del también actor Lloyd Bridges. Aquí el personaje de Slater hace de hijo del personaje de Bridges, y curiosamente Slater venía de hacer una película en la que su personaje hacía de hijo del personaje que interpretaba Jeff Bridges, en Tucker, un hombre y su sueño.

Beau Bridges y Christian Slater admitieron que tenían poco o ningún interés en los videojuegos cuando fueron elegidos. Jugaron durante el rodaje y se hicieron fans.

Del resto del reparto me gustaría reflejar una cosa curiosa, de mano del actor Frank McRae. Este actor coincidió en varias películas con Stallone, siendo especialmente recordado su papel de Eclipse en Encerrado. Pues bien, aquí en una de las escenas conduce un camión que es el mismo que se utilizó en Yo, el Halcón (1987) protagonizada por Sylvester Stallone, como Hawk. Todavía tiene escrito HAWK en la puerta.


En cierto modo la película me da un ligero aire a Yo, el Halcón, y posiblemente a la que más se me parezca de las que he visto, sea a Bonita, con Brooke Shields.

Además del reparto y el detalle de la videoconsola Nintendo en el que luego ahondaré, hay más cosas que hacen muy interesante la película, en mi opinión, y aún siendo una película con protagonistas infantiles, no es completamente una película infantil como tal, ni dirigida solamente a ese tipo de espectadores.

Podríamos decir que la película tiene un alto componente de Road Movie (que como ya he dicho en otras ocasiones es un subgénero que me gusta mucho), cosa que me sorprendió, mezclando bien con aventuras (suelen ir de la mano ambos géneros) y un poco de humor.

Pero la parte Road Movie, está muy bien elegida, por esos territorios icónicos y solitarios del medio oeste que tanto me gustaría conocer y conducir.

Y otra vez me volví a ver sorprendido por el aspecto musical de la película, bastante presente y con dos momentos importantes, cuando suena Send me and Angel de Real Life, y la canción de epílogo, una vez más la mejor manera de cerrar una película, que además tampoco conocía y pasó a engrosar mi carpeta musical de canciones de películas, I found my way interpretada por Sally Dworsky.


Pero, en fin, todo esto no le daría a la película una especial valoración si no fuera como he dicho por la presencia de la consola Nintendo NES. Es la única consola que tuve en mi vida, que nos regalaron por Reyes mis padres, seguramente poco después de que se hiciera esta película.

No fue una consola excesivamente popular (compitió con la Mega Drive de Sega), porque en esa época las consolas evolucionaron rápido y pronto quedó obsoleta o menos atractivas que las que iban apareciendo nuevas.

El caso es que, aunque no jugué a muchos juegos y tampoco me pasé las horas muertas jugando con ella, la sigo conservando como un recuerdo muy bonito y especial de mi infancia, con el significado además que no es necesario ni tener muchas consolas ni muchos juegos, ni tener la más actual, si no ser agradecido por lo que tienes y saber valorarlo.

Hay que reconocer que las consolas eran, y creo que siguen siéndolo, bastante caras, por eso cuando nos la regalaron, sólo lo hicieron con un juego ... el Super Mario Bros 3.

Así que cuando al final de la película aparece el juego, para decidir el ganador del torneo organizado, casi se me saltan las lágrimas.
Bien es cierto que apenas se ven unas cuantas pantallas del primer reino, y que todas las escenas de juego están pregrabadas, pero la conexión que senti en ese momento con la película fue enorme y no se me olvidará nunca.

De hecho parece ser que la película mostró los primeros destellos de este juego y algunos afirman que contribuyó al éxito del juego en Estados Unidos.












Valoración:                            8/10












 


06 junio 2024

Pisa a fondo (1986)

 





Después de bastantes días con bajo estado de ánimo (más la habitual nula energía que tengo), es increíble como una película elegida aleatoriamente puede levantarte una sonrisa, hacer pasar un buen rato, esbozar una sonrisa y evadirte de los problemas por lo menos durante esas casi dos horas.

Y digo aleatoriamente porque solo conocía la participación de Michael Keaton y el título de la película, ni siquiera tenía anotado en mi ficha por ejemplo, que entre el reparto se encontraba una actriz que me gusta mucho como Mimi Rogers.

Keaton es otro de esos actores nacidos a principios de la década de los cincuenta del pasado siglo, al que las películas juveniles de los 80 ya le pillaron un poco mayor, pero era tal la explosión cinematográfica y la cantidad y variedad de películas que se rodaron, que supo encontrar su hueco, especialmente en comedias con protagonistas no tan juveniles o en películas de acción.

Revisando su filmografía me he percatado de que le tenía muy poco trabajado, y la verdad es que ha sido todo un acierto elegirle a él y a esta película como protagonistas.

Hay más actores conocidos en el reparto, principalmente John Turturro, con un nombre muy característico e imposible de olvidar, y en contraprestación George Wendt, con un nombre muy poco comercial y difícil de recordar, y por ello posiblemente fuera el actor protagonista de Cheers que menos recorrido tuvo, o del que es más difícil acordarse, aunque supongo que muchos dirán "el gordo que estaba en la barra bebiendo cerveza habitualmente".

No es extraño una mezcla en el reparto entre actores americanos y asiáticos, aunque principalmente asociado a películas de artes marciales, con repartos mayoritariamente asiáticos y la excepción de uno o dos actores principalmente estadounidenses.
Aquí, con un reparto amplio, hay buena representación de ámbos.

Decía el director, Ron Howard, al recordar su carrera, que uno de los errores que se dio cuenta de que había cometido fue que cuando eligió actores japoneses-estadounidenses que podían hablar japonés, para él era inapreciable, peroellos no podían hablar el idioma tan bien y Howard realmente no puso a prueba su fluidez. Cuando Howard estaba trabajando con actores japoneses, señalaron que el idioma hablado por el elenco japonés-estadounidense no era muy bueno y, en ese momento, Howard ya había filmado el 90% de la película. Howard calificó esto como un error de novato que nunca volvería a cometer.

De hecho el actor estadounidense de ascendencia japonesa Gedde Watanabe, obtuvo el segundo mayor caché de entre los actores de la película, a pesar de que como ya he comentado había actores relativamente importantes.



Al igual que hay muchas películas de los ochenta que son relativamente parecidas, y hay varios patrones que aparecen con cierta periodicidad cuando ves películas de ésta época, también muchas de ellas destacan por su singularidad, y originalidad, y creo que ése es el principal valor de ésta, contar una historia que yo desconocía hasta ahora en el cine, y además bien hecha y entretenida.

Top Gun, Karate Kid II o Nueve Semanas y Media fueron algunos de los estrenos con los que tuvo que lidiar aquel año el filme dirigido por el talentoso Ron Howard, quien llegaba precedido por el éxito de Cocoon, y cuya carrera empezaba a despegar: luego estuvo al frente de, por ejemplo, Apollo 13 o Una mente brillante (ganó el Oscar).

Los años ochenta fueron una década de fiestas divertidas y películas sobre la mayoría de edad. Es agradable ver como el director nos muestra una película que se atreve a expresar una opinión sobre las culturas estadounidense y japonesa, logrando acuerdos y entablando relaciones afectuosas entre sí sin confundir a ninguno de los dos países.

El título original que se le dio a la película fue Gung Ho, un término chino, no japonés, que viene a significar trabajar juntos. Pero entiendo que a los japoneses no le gustó la representación de trabajar juntos que ofrecía esta película, o ese concepto en el ideario americano, y así por ejemplo los ejecutivos de Toyota utilizaron más tarde la película como ejemplo de cómo no gestionar a los trabajadores estadounidenses.


Uno de los detalles más curiosos y a la vez atractivos para mi, es el vehículo protagonista de la película.
Ya en los primeros planos en los que se veían posters en las paredes, me pareció reconocer con gran extrañeza, vehículos de la marca italiana Fiat, y más en concreto un modelo, el Regatta, no excesivamente vendido aquí en España, pero que mis padres estuvieron a punto de comprar y en el vecindario había un par de ellos.

Cuando se empizan a ver escenas en la cadena de montaje, con la estructura del coche, la sospecha se confirma, y finalmente cuando se ve un vehículo terminado queda totalmente resuelto el misterio.
El slogan de la película podría ser "El día en que los Fiat fueron japoneses".

¿Pero, cómo es posible que una película americana, con influencia japonesa, utilice coches italianos como argumento de la misma?

Buscando información he encontrado detalles al respecto:



La trama, con enredos desavenencias y situaciones ridículas, contó con un escenario muy particular: la planta de Fiat en Argentina, situada en El Palomar y en su satélite de Berazategui. En esta última se producían los modelos locales de Peugeot hasta 1980, cuando Sevel concentró toda su operación en la fábrica de la marca italiana en Tres de Febrero.

Todo ocurre en las líneas de montaje de los Fiat 147 y Regatta, dos modelos emblemáticos de los años 80 en la Argentina. En la ficción, ambos íconos nacionales pasaron a ser vehículos de Assan Motors, y se los ve con un logo redondo sobre las tradicionales barritas cromadas que los Fiat de aquella época tenían en la parrilla delantera.

¿Cómo fue que Paramount Pictures llegó a filmar a El Palomar? Keaton, Howard y todo el elenco de Gung Ho debieron desarrollar varias jornadas de filmación en el conurbano bonaerense. El contrato de Paramount y Sevel (Sociedad Europea de Vehículos para Latinoamérica) para utilizar la planta de Fiat fue una solución a los altos costos que implicaban realizar el filme en una planta japonesa. Y en los EEUU se hacía imposible disimular los modelos americanos y hacerlos pasar como japoneses. La Argentina, entonces, fue la alternativa para la realización de la comedia.



Un auténtico choque cultural, que lleva a la reflexión sobre que modelo es mejor, no evidentemente en lo laboral, si no también en lo personal, vivir para trabajar o trabajar para vivir.


Por último, me gustaría reseñar un detalle de esos que a mi tanto me gusta, que motivan al empezar una película y que ponen un epílogo brillante a la misma. La utilización de dos buenas canciones, una de apertura y otra de cierre, y además, como muy de vez en cuando me pasa, con el descubrimiento de una que no conocía.

Tras una breve introducción y mientras se van ofreciendo diferentes imágenes de fotografía de Tokyo, a la par que salen los títulos de crédito, suena de fondo Don't get me wrong, de The Pretenders, y al final, durante los títulos de crédito y de manera íntegra (como en misa, una canción de cierre una vez recibida la bendición), suena Working Class Man, del cantante australiano Jimmy Barnes, canción que desconocía totalmente.
Parece ser una canción hecha por encargo para esta película, que en Australia se estrenó precisamente con ese nombre.
A pesar de ello no se lanzó ninguna banda sonora de la película.


Para mi una película subestimada y creo que podríamos incluirla en la categoría de joyas ocultas.












Valoración:                                 8/10














27 abril 2024

Los últimos guerreros (1995)

 








Hace unos años era más reacio a las películas de la década de los 90 del pasado siglo, pero poco a poco voy dándole oportunidades, preferentemente a las de la primera mitad de la década, y sorprendentemente todavía hay bastantes películas interesantes, y desconocidas, como ésta, que hasta podría calificar, siempre en mi opinión, como una pequeña joya oculta.

Cuando no le dedicaba este tiempo al cine y era un aficionado con mucho menos conocimiento, me costaba diferenciar entre Tom Skerrit, Tom Selleck y Tom Berenger, el protagonista de hoy. En especial los dos primeros a veces tenían looks parecidos, con bigote, pero sobre todo que los tres nombres se me parecían.

No he visto excesivas películas de ninguno de ellos, pero más o menos ya los tengo totalmente ubicados y diferenciados, y sé que Skerrit (del que hace más tiempo que no veo nada y ya por encima de los 90 años), tiene un papel protagonista en Alien y también trabajó en Top Gun. De Selleck, cuyo quizás su papel más representativo sea en la serie Magnum, le vi en La Gran Ruta Hacia China, y Tom Berenger tiene un bagaje quizás más importante.


Y es que en su momento podría quizás hasta parecer el sucesor de Paul Neman, con sus ojos azules, y un ligero parecido físico, pero habitualmente siempre le he visto un poco pasado de peso y con la impresión de ser un poco descuidado o no interesarle ese gran estrellato.
De hecho, pensaba que era una apreciación mía, pero me he encontrado con esta cita que hace más extendida esta consideración, "ganó el papel de Butch Cassidy en Los primeros golpes de Butch Cassidy y Sundance (1979) por su parecido con Paul Newman".

De hecho su bagaje en los años 80 no fue ni muy prolífico ni muy exitoso, aunque interviniera en películas como Platoon o Nacido el 4 de julio (nominadas ambas al Óscar a la mejor película, así como también otras dos en las que ha intervenido, Reencuentro y Origen), y sus papeles más recordados llegan en la década de los 90, en películas como Jugando en los Campos del Señor, Acosada (película de la que parece no guardar muy buen recuerdo) y sobre todo El Sustituto.

Realmente se podría hacer una lista de películas más importante, y casi más extensa, con las que estuvo a punto de conseguir un papel, pero que finalmente fue a manos de otro actor.

Por ejemplo, en esta película cuenta con la misma voz de doblaje con la que vemos a Kevin Costner en sus películas, y que también podría haber interpretado esta película perfectamente. Pues al parecer Berenger fue candidato a cuatro papeles que finalmente cayeron todos en manos de Costner, en las películas, Los Intocables de Eliot Ness, Los Búfalos de Durham, Bailando con Lobos y JFK.

También estuvo en el casting para protagonizar películas tan importantes como Jungla de Cristal, Robocop y Pretty Woman, nada más y nada menos.


Es la única película dirigida por Tab Murphy (y resulta extraño viendo el buen resultado que consiguió), quien también escribió el guión a principios de la década de 1980 y le llevó más de 10 años conseguir financiación para la película. En un artículo del Chicago Tribune, Murphy dijo: "Esta, para mí, es una pequeña historia personal, porque realmente refleja muchos de mis intereses mientras crecía: la naturaleza, los indios, los animales, la aventura..."

Uno a veces se pregunta por qué unas películas tienen tanto éxito, y otras relativamente parecidas caen completamente en el anonimato.
Además de a Bailando con Lobos, la película también se puede dar un aire a El Último Mohicano (de hecho los títulos originales son muy parecidos, Last of the Dogmen frente a The last of the Mohicans) en líneas generales, y luego en algunos detalles menores a otras como El Fugitivo, Caída Libre o Máximo Riesgo, tres de ellas muy conocidas y con éxito en taquilla, mientras ésta en cambio no creo que sea muy conocida aquí en España.

Y es que tanto ésta película, como Máximo Riesgo, así como la saga de Rambo tienen en común al productor libanés Mario Kassar, que además coincidió con el tercer actor protagonista de esta película, Kurtwood Smith, en Rambo III.


La segunda pata de la película, después de Tom Berenger, es una siempre fiable Barbara Hershey, a la que había visto hace poco en Vidas Distantes, y a la que todavía no he visto desafinar.

Aunque se intenta ambientar en Montana, la película está rodada en Canadá, siendo especialmente notable el Parque Nacional de Banff, en la región de Alberta, proporcionando un clima y un entorno idílicos para esta historia (la buena banda sonora también contribuye a ello) y ofreciendo estampas de gran belleza, como una increíble cascada, que es uno de los accidentes geográficos que más me gustan, y que últimamente están presentes en las películas que veo.

Y es que hay una frase en la película que me incitó a detenerla y anotarla, y que refleja porque este tipo de películas me gustan en especial. 
"Estar al aire libre me resulta muy estimulante, muy vitalista" 
A mi también y más si es con poca gente y la gente adecuada.










Valoración:                                8/10












26 marzo 2024

A espaldas de la ley (1989)

 





Podríamos considerar a M. Emmet Walsh, fallecido la semana pasada a tres días de cumplir los 89 años, como un paradigma de actor secundario, es decir, ha participado en muchas películas, con un papel relativamente poco importante, pero notándose su aportación.

Además con una característica poco habitual, y es que algunos secundarios suelen ser protagonistas en alguna película menos importante, mientras que Emmet Walsh era secundario en películas donde había papeles notables, y también lo era en otras películas donde no conoces a ningún otro actor.

Además es de esos actores que a veces pasan desapercibidos, bien sea porque sale 5 minutos, o porque lo haga con un look menos habitual del característico suyo, pero me he puesto a repasar su filmografía y he visto bastantes películas en las que trabaja (varias de ellas desde que comencé mi blog), algunas incluso bastante importantes, aunque no recuerde su presencia en ella.

Como por ejemplo

- Brubaker
- Dos hacia California (*)
- Blade Runner
- El desafío americano (*)
- La mejor jugada
- Gatos salvajes (*)
- Un lugar de descanso (*)
- Arenas blancas (*)


Y la verdad es que, independientemente de lo que me haya gustado la película o no, elegí una que encaja perfectamente con el concepto que tenía de él como actor, un papel secundario pero a la vez importante, no apareciendo hasta mediada la película, y sin tener muchos minutos de pantalla, pero siendo un personaje con peso en la misma.

De hecho su papel gana en importancia incluso al de Mimi Rogers, que me pareció tremendamente desperdiciada por el director Carl Schenkel (aunque la película está basada en un libro y evidentemente eso puede influir en ello), dejando todo el peso para un todavía relativamente poco afamado Denzel Washington, que luego en los noventa se convertiría en uno de los actores más importantes de la industria cinematográfica, a pesar de que su filmografía no es excesivamente dilatada.

Incluso al parecer se eliminó una escena en la que Denzel Washington y Mimi Rogers se besan, debido a reacciones negativas en las audiencias de prueba. La contundente justificación para la eliminación de la misma fue "Las mujeres negras odiaban la escena. Los hombres blancos odiaban la escena".


Tampoco había mirado nada acerca de la película y con los títulos de crédito, con los colores habituales de la cultura Reggae, y la música de apertura que suena, me dejaron claro que la trama se iba a situar en Jamaica, en una película con clara mayoría de actores afroamericanos (aunque todos sean estadounidense y ninguno medio importante jamaicano), y posiblemente en la primera película que veo ambientada en esta isla. 

Una película de investigación sobre un crimen que me deja un poco frío. Tardé un rato en aclararme y entender bien lo que estaba pasando, de hecho ya hacia el final lo hilé todo mejor (no sé si es que estaba poco concentrado o distraído), pero que durante toda la película me parece poco brillante, sin que por ello esté mal. 

Y es que para girar todo en torno a un crimen, es tan relajada, que te hace olvidarte de que ha habido un asesinato, y seguramente para el ritmo de vida que se tiene allí (imagino que más relajado) encaje perfectamente, pero a mí se me queda como una película como poco misterio y poca acción.

Como dije más arriba, todo el protagonismo recae sobre el personaje de Washington, desaprovechando otros, y en mi opinión, el director no sabe sacarle bastante más provecho a la atmósfera que abraza la película, faltando variedad de localizaciones y no haciendo un mayor y mejor uso de los paisajes circundantes, quedando todo muy reducido a escenas de interiores y dos o tres localizaciones de escaso valor visual.

La película tarda tanto en llegar a donde se dirige que es posible que tengas ganas de quedarte dormido en varias ocasiones.

En definitiva, una sólida interpretación de un Denzel Washington al más puro estilo Sidney Poitier, pero que no consigue potenciar un guión un tanto pobre.











Valoración:                                  5/10













12 marzo 2024

Aprovecha tu oportunidad (1988)






Como la anterior película que vi, aunque no me disgustó, no era justo lo que andaba buscando, elegí ésta, a la que le habría encajado a la perfección el título de la anterior, Un ligón en apuros, y que además tiene la curiosidad que el nombre del personaje principal de la película (John Rippley), guarda un gran parecido con el nombre del actor protagonista de la otra película (John Ritter), curiosidades y casulidades que me pasan!

Parece ser que el actor reconvertido a director (tiene un pequeño papel en esta película y yo le recuerdo por lo menos de un episodio de El Equipo A), basó el guión en una experiencia personal suya parecida a la del protagonista.

Ésta película, totalmente desconocida, posbilemente hoy no se haría, por las corrientes de pensamiento y la moral que se intenta imponer en la sociedad, y el papel que juegan las mujeres en la película, pero yo simplemente lo veo como una película (Ficción), y como un rato muy entretenido que pasé.

El caso es que, aunque pueda parecer, que muchas de las comedias de los ochenta se pueden parecer, y haya quien piense que vista una (o varias), vistas todas, a mi me ha parecido diferente, fresca entretenida y con bastantes matices interesantes que me han sorprendido y me han agradado.


Entre esos matices evidentemente, no puedo negar que destaque el de la actriz protagonista, Vanessa Angel (un nombre que a mi me suena maravillosamente), y la colección de sonrisas bonitas que se ven a lo largo de la película (evidentemente también hay una colección de cuerpos bonitos, algunas chicas que habían aparecido en la revista Playboy, pero no creo que tenga excesiva carga sexual, aunque la película tiene calificación R, que significa restringido, y que suele ser para mayores de 18 años). 

Ella estaba en su primer papel protagonista, y me parece que está francamente bien. Una actriz, como las que he visto últimamente (Kelly Lynch o Lori Singer), del club de chicas altas, esbeltas, guapas, que parece que se han ganado esos papeles por su innegable atractivo físico, pero que demuestra que también sabe interpretar.

Junto a ella, un desconocido para mi Bruce Greenwood, que me resulta un poco inexpresivo, pero que me parece que interpreta bien el personaje central, aunque casi parezca más un doble de un joven Kevin Costner.

La película tiene buenos recursos y variantes, escenas de bastante contraste entre sí, y me parece que están bien enlazados, no perdiendo ritmo en ningún momento ni haciéndola pesada, ni siendo excesivamente intuitiva. Incluso hay un pasaje extravagante, pero para mi muy curioso y entretenido, con imitadores de actores del cine clásico.

El último matiz interesante, una vez más en el cine de esta época, es la música de la misma, que no es que sea mucha (en la ficha de IMDb solo aparecen cuatro canciones), pero me sorprendieron muy gratamente, porque además no las conocía, Let's get serious y Forever I love you, interpretadas por Lenny McDaniel, la que también desconocía.

Aunque la película toma un aire romántico durante unos cinco minutos, no creo que para nada se pueda considerarla como tal, eso si, los minutos finales también lo son, y me parece un final bonito, tierno, feliz y muy romántico, pero a la vez muy ingenioso y muy buen colofón a la misma.


La película retrata simultáneamente actitudes sexistas combinadas con una crítica de las mismas, siempre siendo el protagonista un hombre, no recuerdo una mujer en un papel similar.
No obstante, se le puede sacar una buena moraleja a la película también (aunque ya he dicho, que es mejor verla como un rato muy entretenido), por un lado, pretende ser una película sobre los placeres de la monogamia y el compromiso, pero por otro también te insta a reflexionar y estar atento cuando realmente se presente alguien en tu vida que merezca cambiar hasta el más inflexible de tus principios por esa persona (por Vanessa Angel sin duda), y no desaprovechar la oportunidad, porque raramente las oportunidades se vuelven a presentar.

No dejes escapar la oportunidad de ver esta película, sobre todo si eres amante del cine de los ochenta, porque no me parece una más y seguro que te entretendrá (aunque reconozco que la película para mi tenía connotaciones especiales que la han hecho más especial que a un espectador más imparcial).











Valoración:                                      7/10













09 marzo 2024

Un ligón en apuros (1987)

 




Nunca he sido muy aficionado a las comedias románticas, aunque entiendo que tengan su público, y que en determinadas circunstancias personales sean casi obligatorias cada cierto tiempo, en especial en fechas o acontecimientos señalados. Yo más o menos he ido esquivándolas, y si veo una es por elección propia.

Para decidirme a ver una película de este género tiene que tener una premisa fundamental, y es un equilibrio entre la parte de comedia y la parte de romance, y cuando hablo de equilibrio no me refiero a que sea un cincuenta por ciento (imaginativamente, es imposible de calcular), de cada género, tiene que pesar mucho más la parte de comedia.

Para encontrar películas de este género que me gusten creo que es obligatorio buscarlas entre la década de los 80, como ésta.

Y es ahí donde encaja perfectamente John Ritter, un actor casi exclusivo de comedia, pero al que los años ochenta ya pillaron un poco más mayor, y no podía competir con los adolescentes que desembarcaban con mucha fuerza en el cine en esa época. Pero para papeles de este estilo, donde ya se necesita un actor más maduro, era el candidato ideal.
Un actor no muy conocido aquí en Europa, o si no eres muy aficionado a este tipo de películas, pero con buena reputación en Estados Unidos, que falleció prematuramente a los 55 años.

Y otra buena premisa para que este tipo de películas funcionen es que la actriz protagonista no sea excesivamente atractiva para comerse toda la atención de la misma.
Y creo que la elección de Connie Selleca fue bastante afortunada. Un nombre que siempre me ha resultado familiar, pero con una filmografía tirando a exigua, con pocas películas y nada importantes, siendo muchas de ellas Películas para televisión.

Dos detalles curiosos del reparto. Uno de los protagonistas es John Bennett Perry, padre del recientemente fallecido Matthew Perry. Y otra actriz, con un papel más residual, es Shannon Tweed, chica Playboy, y que posteriormente derivó su carrera hacia películas de corte erótico, buscando sacar provecho a sus mejores atributos.


En general es una película aceptable, dentro de sus limitaciones. Tiene diversión, sentido del humor, buenas actuaciones y excelente mensaje moral, a pesar de haya fragmentos de la película que no tengan mucho sentido, o que el ambiente general de la misma pueda parecer un tanto anticuado para el año en el que se rodó.

De todas maneras he de reconocer que el momento que más me ha gustado de la película, es también el más romántico, pero es gracias a una canción que desconocía, que sonó durante unos instantes. Indagando, llegué a adivinar que se trataba de una canción de Mike & The Mechanics, un grupo de los 80 que yo descubrí, ya en el siglo XXI, creado por Mike Rutherford, componente de Génesis junto a Phil Collins, y con la reconocible voz de Paul Carrack. 

Una canción más empleada en una película de los 80, que desconocía, y que me generó una gran emoción de lo bien que sonaba. Viene muy a cuento en el momento que suena, y ya digo, que aunque posiblmente sea el momento más romántico de toda la película, te transporta hacia momentos de paz, tranquilidad y recuerdos agradables que enriquece notablemente la película.


Pero bueno, la moraleja final es buena, y deja con buen sabor de boca a los que lo sepan apreciar.
La película nos enseña que se trata de ir más despacio en una relación y estar con la persona adecuada y no sólo con un hombre guapo, rico o exitoso.









Valoración:                                  5/10














23 febrero 2024

Corazón de campeón (1983)









Las películas que tratan sobre la temática del cáncer siempre son difíciles para mi.
Recuerdo cuando hace unos años vi, una sorprendentemente desconocida Elegir un amor, con una Julia Roberts en pelan juventud, que me resultó bonita a la vez que triste, y poco tiempo después tuve mi experiencia con el cáncer, y desde entonces, a pesar de que me gustó la película, y sobre todo cuenta con una espectacular banda sonora de la mano de Kenny G, no he conseguido volver a verla.

También, ya un tiempo después de haber dejado atrás esta traumática experiencia, vi otra película con argumento parecido, Silencio de Cristal, con una actriz que me encanta como Jamie Gertz, encarnando a una paciente con cáncer.

Pero en general, suelen ser películas tristes, y que a las personas que hemos tenido un episodio similar nos puede despertar la tristeza y el sufrimiento por recordar tiempos pasados.
Aunque también como socio de la Asociación Española Contra el Cáncer, son películas de esperanza, y que reconfortan al ver como hay gente que se esfuerza o que contribuye para intentar evitar que otra gente tenga que pasar por el sufrimiento que genera esta enfermedad.


No obstante, esta película, que ya sabía de lo que iba, también tenía a priori un alto componente de deporte, y es una temática que no abunda mucho y que además hacía ya un tiempo que no elegía a la hora de visionar una película.

En los años 70 y 80 se hicieron algunas películas con el atletismo como argumento principal.
Entre otras: 

Running (1979) 
Personal Best (1982) 
El corredor valiente (1983) 
El año de la victoria (1978) 
Corazón de campeón (1983)

Aunque realmente es un auténtico drama, con un toque de aventura y una cierta dosis de road movie, aunque éstas se caractericen por la utilización de un vehículo como medio de transporte, y aquí el desplazamiento es puramente a través del esfuerzo.


La película estaba basada en una historia real y por tanto se eligió a una persona amputada real para la interpretación del personaje principal, en lo que sería el primer y único papel de este actor eventual.
De todas maneras, habría sido muy complicado, con los efectos de la época, fingir que una persona normal, con sus dos piernas en perfecto estado tuviera una de ellas amputada.

Y aunque Eric Fryer hace un gran trabajo, evidentemente su enorme limitación le invalidaba para cualquier otro papel que no fuera similar a éste, pero nos dejó esta gran interpretación y un ejemplo de lucha contra las adversidades.


Una TV Movie, totalmente desconcida, pero con dos nombre destacados en el casting.
El primero el de Robert Duvall, un muy talentoso actor al que extraña ver aquí en este papel, en este proyecto tan anónimo y austero, aunque realmente no aparece en escena hasta el minuto 58 de la película, y el segundo el de Bill Conti, uno de mis compositores favoritos junto a John Barry y otros, autro de Bandas Sonoras como Rocky o Evasión o Victoria y cuyo inconfundible estilo se reconoce rápidamente, y da valor a la película.

Parece ser que el lagado de Terry Fox, que era prácticamente un héroe en aquella época en Canadá, siguió durante muchos años, celebrándose carreras para recaudar fondos y permaneciendo vivo su Maratón de la Esperanza.

Aunque hay gente que tacha a la película de innecesariamente negativa, ya solo la palabra cáncer implica un grado de negatividad brutal. Y si está basado en una historia real pues será mayoritariamente verdad. No todo pueden ser películas bonitas o con final feliz, las historias pueden ser variadas, y cuando algo está inspirado en un acotecimiento tan duro de la vida real más.

Me sorprende que haya gente que se quede con eso y no con los mensajes positivos que desprende la película en global sin entrar en detalles puntuales o superfluos.


Me gustaría terminar con un poema (traducido) que he encontrado que aparentemente escribió la novia real de Terry Fox


"Dicen que el Dragón nunca duerme. Acecha a su presa en silencio y frío, y cuando ataca, qué fuego maligno hay en su veneno.

Un día la serpiente, descuidada por su avaricia, se atrevió a apoderarse de un Caballero 'Nacido del Sol'. El mordisco ardió profundamente, directo al alma.

La serpiente se mantuvo firme: el daño estaba hecho. Pero la muerte no pudo vencer. Porque aunque el fuego lo había atravesado, el Caballero del Sol se mantuvo fuerte y fiel.

La fiebre cedió, la serpiente huyó y un miembro fue su premio.

El caballero se levantó y pronunció estas palabras: 'Has quebrantado mi cuerpo pero no mi espíritu. No me lamentaré ni lo temeré.

Cuidado con la bestia, no has ganado esta batalla, mi búsqueda acaba de comenzar."










Valoración:                                    7/10












08 agosto 2023

La maldición del diamante (1987)

 






Decepcionado por una película que vi recientemente con los diamantes como protagonistas, decidí buscar una alternativa sobre la misma temática y di con ésta, que evidentemente me llevó de nuevo a hacer un viaje virtual por África.

Las películas de África, digamos que las podemos clasificar en estas temáticas:

- Películas sobre safaris
- Películas sobre tribus
- Películas sobre tesoros
- Películas sobre exploradores
- Películas sobre colonialismo


Digamos que ésta es difícil de encasillar en una de esas temáticas, no tiene una clara predominante, y podríamos decir que tiene un poco de tribus, un poco de tesoros, un poco de exploradores y un poco de colonialismo. Pero no es una película sobre África al uso, y me recordó mucho a la película que vi de Stephen Boyd y Juliette Greco, La gran apuesta, recorriendo en un camión parte del continente africano.

Aunque hablar de diamantes y de África, a todo el mundo se le vendrá a la cabeza la más reciente Diamantes de Sangre, creo que una de las últimas películas que fui a ver a un cine, y que no está mal, pero digamos que me parece ridículo que la gente ponga tanto el foco en esa película y la traten como una de las mejores películas que han visto y luego no sean capaces de ver por ejemplo ésta. Lo lógico es que si una te ha gustado tanto, la otra también te puede entretener. Pero allá cada uno con sus clichés y el vetar cualquier película anterior a cierto año.


Dirigida por el británico Kevin Connor, que siempre me gustó por su reiteración con el cine fantástico allá por los años setenta, con títulos como La tierra olvidada por el tiempo, En el corazón de la tierra, Viaje al mundo perdido o Los conquistadores de Atlantis
Después de este ciclo importante de películas sobre esta temática, prácticamente el resto de su carrera han sido episodios de series de televisión o TV Movies.

Para el papel principal consiguió los servicios de Brian Dennehy, que aunque no me pega mucho como aventurero, por su tamaño y peso, siempre es un gusto verle trabajar. Uno de esos actores que me parece muy infravalorado, no sé si porque su papel de referencia es el de Sheriff en Acorralado, pero lo cierto es que ese papel me parece excelente, y el resto de sus interpretaciones muy interesantes.

Y aquí descubrí una actriz, que aunque ya había visto alguna película en la que trabajase, no me había fijado en ella, seguramente por tener un papel muy secundario. Pero he de decir, que también me ha parecido un aporte positivo la película por la interpretación de Brooke Adams.


Aunque hay gente que dice, que si coges la mayor parte de la película y te aislas del argumento y del incio, puede parecer que toda ella esté rodada en cualquier zona rural de los Estados Unidos, y quizás le falte algún elemento visual más de África, hay un elemento, bastante autóctono del continente negro, que está continuamente presente, como son las maravillosas acacias.

De todas maneras, ya he dicho que no es una película al uso sobre África, y una vez que el inicio te sitúa allí de manera inequívoca, es bastante difícil ponerse a elucubrar que realmente no están en África y si en otro sitio menos costoso para el rodaje. No obstante no he conseguido saber los principales puntos de rodaje o archivo fotográfico.


Como colofón, eso que me gusta tanto, aunque no es muy frecuente en estas películas y no parece pegar mucho con el argumento y la situación de la película, pero es una maravilla ver que acaba la película con más de tres minutos de cinta todavía y empieza a sonar una muy bonita canción que desconocía y que recomiendo, con la bonita voz de Amy Holland

Chris Farren & Amy Holland - Nothin' we can do










Valoración:                                   7/10













18 abril 2023

Conexión Sidney (1990)

 




Hay veces que un título te entra por los ojos, y estás convencido de que sin saber nada más de la película, te va a gustar, y eso es lo que me pasó con esta.

Evidentemente tenía claro que se trataba de otra película australiana (aunque el comienzo se sitúa en Glasgow, y me descoloca un poco durante unos minutos), con las que mantengo un idilio sorprendente y agradable, y es que desde que empecé este modesto blog, habré visto más de diez, y prácticamente todas me han parecido muy interesantes.

Eso sí, hasta ahora, prácticamente todas ellas, eran de la Australia interior o rural, desértica, deshabitada, pacífica, silenciosa, placentera, majestuosa ... y aquí por título, intuía que iba a ser más una Australia cosmopolita, sin que ello me importara de partida.

Y es que tenemos la mala costumbre de prejuzgar todo en la vida, y el cine no iba a ser menos. Y si no es de primeras una película americana, o no hay o varios actores conocidos, dudar a la hora de verla, o irla aparcando ante otras opciones más conocidas.
Y eso que el cine como tal lo inventaron los franceses, así que deberían ser en todo caso las películas a las que se dieran prioridad. Pero el cine inglés no tiene nada que envidiarle al americano, y en otros países te puedes encontrar grandes películas (con el cine español soy algo más crítico), pero hasta ahora el cine australiano se adapta totalmente a mis gustos y me dan ganas incluso de revisionar alguna de estas películas que he ido viendo en estos últimos años.


No sé como llegó hasta mis manos esta película (ni a quien tendría que agradecer enormemente que la compartiera en su día), totalmente desconocida (solo 42 votos en IMDB, incluído el mío, y en Filmaffinity ni está registrada), que ni siquiera creo que tuvo ningún impacto en la propia Australia, y creo que ni siquiera se proyectó en los cines. 
En el momento del rodaje, el actor más conocido, John Hannah (4 bodas y un funeral o La momia), todavía era un semi desconocido, pero lo que me resulta sorprendente es que tiene muy calidad la cinta y que las voces de doblaje al español son de las mejores que había en esa época, no es que esté doblada recientemente.

Sin ser americana, ni sin ser una comedia, si que aprovecha otros buenos aspectos de la década de los 80, para convertirse en un producto interesante y de valor para mi.


- Localizaciones atractivas
- Días soleados y veraniegos
- Buenas voces de doblaje
- Buen ritmo
- Canciones interesantes y desconocidas

Quizás el guión no sea ninguna maravilla, lo reconozco, pero el resto de ingredientes hacen un buen plato, y creo que en este caso el guión no es como la sal, que te deja un plato soso, es como si te olvidaras de ponerle perejil o algún complemento secundario, se puede seguir viendo igual de bien.


Otra cosa que me ha resultado curiosa, es que el director, australiano, es de los que nació el mismo día que yo, que siempre cuando llega mi cumpleaños me gusta ver algo de alguien que haya nacido en mi mismo día, aunque con su filmografía como director, me parece que va a ser difícil volver a ver algo suyo, igual en su faceta de productor.

Para los que os guste la playa, el surf, el cine de los 80, o como a mí, descubrir películas de actores famosos antes de que lo fueran, os la recomiendo encarecidamente.









Valoración:                                          7/10













09 febrero 2023

Vacaciones en la nieve (1986)

 




Siempre me gusta, de vez en cuando, buscar alguna película que corresponda con la época del año en el que estamos, o que lleve en el título el nombre del mes en curso, y el título de ésta me atrajo y me parecía apropiado para esta época del año.

Pero me dejó descolocado. 

Esta es una de las película más extrañas que he visto en bastante tiempo, porque aunque veas películas absurdas tienen sus diálogos y sus actores, pero ésta parecía más un documental sobre nieve, o una telepromoción de algunas estaciones de esquí, o si me apuras una sucesión de vídeos musicales, porque los pasajes de música abarcan la mayor parte de la película, y para unirlos hay unos escasos diálogos y un hilo conductor un tanto surrealista.

Cuando empieza la película con un paseo idílico por Central Park y uno ve los títulos de crédito se le pone una sonrisa y se prepara para algo interesante cuando aparecen las siguientes localizaciones

- Saint Moritz en Suiza
- Kitzbuhel en Austria
- Aspen en Colorado (ampliamente publicitada en películas de nieve americanas)
- Montañas de Utah
- Montañas de Canadá

Evidentemente como película, aunque tiene algunos rasgos de los 80 muy significativos, no me parece que tenga mucho valor, pero visual y auditivamente no deja de ser interesante. Buenos paisajes y escenas de esquí en diferentes lugares, y una banda sonora que me ha parecido muy buena, y que me ha permitido conocer dos canciones que me han gustado mucho y que desconocía


- Back to the magic, de Gary Wright
- Fire and Ice, interpretada por Marietta Waters


En una banda sonora que corrió a cargo de Harold Faltermeyer (productor de la canción principal Fire and Ice, que da título a la película), y en la que encontramos a una banda de renombre en los 80 como Alan Parsons Project.


Al final la comparaba con dos películas que me venían a la cabeza que pudieran tener parecido.
A nivel nieve y esquí me acordé de Fuera de Pistas, en la que también se hace un viaja a Aspen, pero a nivel visual y sobre todo como película era mucho mejor y a nivel música con Electric Dreams, en la que el hilo argumental es la música y los diálogos son menores, pero aquella está muy bien ensamblada y realizada y es una película bien hecha aunque la música sea muy protagonista.

Realmente no sé cual era el propósito de esta película o a que públido iba dirigido, porque realmente bastantes de las escenas de esquí están rodadas en cámara lenta y no suponen nada excepcional, más allá de que las acompañe una buena música y un bonito paisaje.

La última extrañeza que me dejó la película fue cuando al mirar los actores, que no conocía de nada, vi que sus personajes en la película se llamaban igual que ellos en la vida real, y no tienen ningún bagaje cinematográfico salvo alguna película puntual de nieve más.








Valoración:                                 4/10