23 noviembre 2023

Asalto al furgón blindado (1978)

 





Como ya he dicho en otras ocasiones me he aficionado al cine australiano de finales de los 70 y los 80, preferentemente películas que giran en torno al mundo rural, pero también algunas de carácter urbano como ésta.

Algunas veces las he visto de manera involuntaria, pero en éste caso no, porque ya tengo claramente identificado a su director de otras cuantas películas suyas que he visto, y por la presencia de Bryan Brown, que dado el año de la película suponía que todavía no era alguien famoso y se trataría de un trabajo en una película australiana.

Tanto su director Bruce Beresford, como el actor Bryan Brown, son dos de los máximos exponentes del cine australiano, y sobre todo dos que traspasaron fronteras y consiguieron una carrera más internacional, alcanzando el mercado más importante de todos, el estadounidense.
El resto de actores eran bastante populares en el país oceánico, con trabajos similares para la televisión australiana, pero no consiguieron el mismo éxito que Bryan Brown.


De Beresford podríamos destacar, Rey David, Paseando a Miss Daisy, Manto Negro o Un buen hombre en África, (éstas dos últimas las he visto y comentado aquí y me gustaron), mientras que de Bryan Brown, pues por encima de todo está su papel en la archiconocida película Cocktail, junto a la ya estrella Tom Cruise, siendo su otro gran trabajo, en mi opinión, su papel en Gorilas en la Niebla junto a Sigourney Weaver.

Pero a pesar de conseguir éxito posteriormente ésta película no supuso un gran impulso a su carrera, aunque el director venía de ganar el Premio al Mejor Director del Australian Film Institute por una de sus anteriores película, La noche de las elecciones (1976).
La inmediatamente anterior, curiosamente, era una película con un elenco casi exclusivamente femenino, cuando aquí en contraste, se produce una inmersión hacia un reparto prácticamente masculino al completo.

Beresford dijo pasados los años que no fue nadie a verla. Él fue la noche del estreno en Melbourne y había tres personas allí con él. Dice que estaba sentado en la parte de atrás preguntándose a qué hora empezaba la sesión y repentianmente empezó la película con ese escaso público. Y pensó 'esto va a ser un desastre'. Y eso fue.
De todas maneras con el paso del tiempo la película fue ganando espectadores y buenas valoraciones



Aunque esta lista demuestra lo contrario ...



 ... el tema de los robos en el cine no me parece excesivamente explotado, a la par que me gusta, al igual que me sucede con las películas de cárceles.

Tengo un amigo que tiene especial predilección por Ocean's Eleven (2001), aunque posiblemente no haya visto la original de 1960, La Cuadrilla de los Once.
Yo soy más de una película estilo Le llaman Bodhi, a la que de hecho encuentro un parecido razonable en una escena de esta película (no se puede hablar de que haya sido una posible inspiración porque ésta es bastante anterior), que de hecho se refleja en el póster de la misma.

Esta película fue uno de los pocos largometrajes australianos de la década de 1970 que eran dramas policiales/criminales o thrillers.

El director Bruce Beresford vio una copia del libro de Devon Minchin en una librería de segunda mano de Adelaida y pensó que se podría hacer una buena película de él. Beresford dijo una vez: "Era justo lo que necesitaba. Es tan auténtico: todo sucedió realmente".

Y es que es una película curiosa ya que está basada en una novela de 1972, que a su vez está basada en hechos reales, concretamente dos eventos que fueron el robo de un vehículo blindado en Sydney en 1970, donde se robaron 587.000 dólares australianos de una furgoneta blindada Mayne Nickless. El otro también fue un incidente de 1970, un robo de 280.000 dólares australianos en el que bandidos se hicieron pasar por policías e irrumpieron en las oficinas de los Servicios de Seguridad Metropolitanos.











Valoración:                                   6/10















17 noviembre 2023

La patrulla de los inmorales (1977)

 






Uno de los actores que ha fallecido recientemente y que se me había escapado del radar, es Burt Young, o lo que es lo mismo el cuñado de Rocky en toda la saga, Paulie (o Poli, fonéticamente hablando en nuestro idioma).
Aunque para mi pueda parecer un buen actor y popular, tengo un amigo que con mucha perspicacia me dice "¿cuántos de tus amigos crees que sabrían quien era Burt Young?".

Un actor que me daba cierto aire al gran Peter Ustinov, tanto por su aspecto físico, como por su manera de interpretar. Siempre pareció mayor y despreocupado, pero mi sensación es que era un gran actor, que aunque no tuviera una presencia física destacada ni hiciera papeles de héroe siempre aportaba un toque de distinción y de categoría.

No he visto muchas películas suyas, aunque en algunas realmente puede parecer inapreciable su presencia, ya que siempre ha sido un secundario bastante en la sombra, pero no por ello deja de contar con 169 títulos de crédito en su filmografía.


Como ya he expresado y me ha pasado otras veces, una película con un reparto importante no te garantiza que vaya a ser un éxito, o evidentemente que vaya a gustar a todo el mundo.

Sin una gran estrella, aquí empiezan a desfilar muy buenos actores como Charles Durning, Louis Gossett Jr. y James Woods, otros interesantes como o el propio Burt Young, y algunos más secundarios pero también buenos actores de la época como Don Stroud, Perry King o Stephen Macht.

De hecho los cinco primeros fueron nominados en alguna ocasión para un Óscar de la Academia, teniendo dos nominaciones incluso Durning y Woods. El propio James Woods es el único que consiguió una nominación a mejor actor principal y es Louis Gossett Jr. el único de todo el elenco que tiene una estatuilla como mejor actor secundario en Oficial y Caballero.


Por las hechuras de la película y el comienzo no sabía si me iba a encontrar una película de policías parecida a Distrito Apache, una auténtica joya protagonizada por Paul Newman, o algo más similar a Loca Academia de Policía. Y se parece un poco más a la segunda.

La primera mitad (o más) es una comedia sin trama, y además para mi es bastante poco divertida. En su segunda parte, la película da un giro más hacia el drama y, sorprendentemente, esta parte funciona mejor, pero sin ser una maravilla tampoco.

Habitualmente estas películas que suelen mezclar la comedia con drama o terror, o cualquier otro género cinematográfico, me suelen dejar bastante indiferente y no suelo encontrar nada interesante que destacar, más allá de las interpretaciones de los actores, donde destacaría a Charles Durning, que curiosamente aquí su personaje es conocido por el sobrenombre de Cachalote, que me resulta familiar, ya que no hace mucho que vi otra película suya, junto a Brooke Shields, en la que su personaje recibía el mote de La Ballena.

Joseph Wambaugh repudió esta adaptación cinematográfica de su bestseller sobre los bajos fondos del departamento de policía de Los Ángeles, tanto que exigió que se le eliminara de los títulos de crédito, pero la experiencia probablemente lo avergonzó de todos modos. Una mezcla a medias de travesuras obscenas y drama policial real, está construida tan descuidadamente que incluso sorprende que el director Robert Aldrich, famoso por películas tan interesantes como Apache, Veracruz, El último atardecer, Sodoma y Gomorra o Doce del Patíbulo, no haya eliminado su nombre también de los títulos de crédito.










Valoración:                                   4/10














16 noviembre 2023

El día de los animales (1977)

 




Raramente uno se encuentra con películas que traten sobre la naturaleza y la primera mitad de ésta me evocaba a alguna de las rutas de senderismo que he hecho, y que tanto echo de menos desde que la vacuna del Covid me sumió en una fatiga crónica de la que no consigo salir.

Así que toda esa primera parte me hacía recordar a alguna de las escasas películas en las que la naturaleza juega un papel protagonista y con cierto parecido, como Escuela de Supervivencia o Verano de Aguas Cristalinas, más la primera que la segunda.

Pero ya la segunda mitad de la misma me hizo percatarme que era otro ejemplo más de películas sobre catástrofes de los años setenta, y aunque sea con matices o enfoque diferente, la segunda parte es muy evidente que guarda un paralelismo con bastantes de esas películas catastróficas, protagonizadas por animales, de esta década del siglo XX.
Aunque también la parte final me recordó mucho a otra película que vi no hace mucho, como es Perros Asesinos.

Aquí un par de listas con películas parecidas





Esta película a veces se considera, erróneamente, una secuela de la película anterior del director William Girdler, Grizzly (1976). Principalmente porque tenía una  trama similar y el mismo oso entrenado, tenía el mismo productor/distribuidor ejecutivo (Edward L. Montoro), mismo director y la compañía de producción/distribución (Film Ventures International (FVI)), y además contó con un par de actores de aquella película, Richard Jaeckel y Christopher George. 

También hubo una verdadera secuela de Grizzly titulada Grizzly II: El concierto (1983), pero originalmente nunca se completó y, por lo tanto, nunca se estrenó en cines ni en video hasta octubre de 2021.


Con un reparto bastante decente (sorprede por ejemplo ver a Leslie Nielsen en un papel así, o a un muy joven Andrew Stevens), el doblaje parece ser de los años noventa o incluso del siglo veintiuno, pero con unas voces francamente intersantes, de lo mejor fuera de esa época dorada del doblaje que duró hasta los años ochenta incluso.

Interesantes localizaciones elegidas, en las montañas de California, no muy lejos de un lugar muy pintoresco como es el Lago Tahoe, que junto a las interpretaciones de los actores es la mejor parte de la película.

En cambio, como en Perros Asesinos, las escenas de ataque animal me dejan un poco indiferente. Aunque no ocupan mucho tiempo en pantalla (realmente la primera hora de película es casi un mero paseo por la naturaleza) no son especialmente brillantes. 

Hay que tener en cuenta que se trata de un largometraje de bajo presupuesto de un cineasta especializado en películas de serie B que utilizó su ingenio y su empuje en lugar de dinero. Como tal,  el resultado final es interesante.

William Girdler era un buen cineasta imitador, tenía en cuenta lo que cautivaba al público y hacía una película sobre ese tema cuando aún estaba candente. La disminución de la capa de ozono era un tema popular y que preocupaba a la población en aquellos días y él se inventó una pequeña película bonita relacionada con el tema.









Valoración:                                        7/10













03 noviembre 2023

Muerte a 33 revoluciones por minuto (1986)

 





Como segunda película de mi sesión doble de Halloween elegí ésta, que si que me encontré en una lista de IMDb con películas relacionadas con este día, y que además el poster promocional lleva implícita una clara alusión gráfica al día en cuestión.

Aunque realmente luego el peso de Halloween en la película es mínimo. Hay un baile de disfraces que dura muy poco y apenas dos o tres elementos ornamentales más a lo largo de la película para recordar que Halloween está en el trasfondo.

Así que realmente es una película acerca del Rock and Roll, y por para sus seguidores, por mucho que se intente clasificar como una película de Terror. De hecho es más una película ochentera por todo el ambiente que la rodea y los personajes.


Creo que en este caso la traducción del título original al español está bien hecha, aunque no tenga nada que ver uno con otro. Y es que el "Truco o Trato" original, que aquí se debe considerar el Santo y Seña del día de Halloween te podía hacer pensar que era una película que giraba completamente en torno hacia este día y sus tradiciones, cuando como ya he dicho, la presencia es testimonial o incluso residual.

Los "matrimonios" entre el género de terror y otros géneros no suelen funcionar muy bien, en mi opinión. Por ejemplo la mayoría de películas que he visto que son mitad Terror mitad Comedia no me suelen enganchar ni dejar gran recuerdo, son géneros antagónicos. Creo que el Terror combina con la Ciencia Ficción o con la Acción, siempre que haya un argumento decente, pero aquí con la música o con el Rock and Roll, que tiene esa gran carga de oscuridad, con su predominante color negro, e incluso de siniestro por los símbolos, creo que tampoco consigue hacer una unión interesante.
Creo que no intenta ser una película de Terror seria, pero con ello creo que no consigue llamar la atención de la mayoría de los amantes de este género, ni de los admiradores del cine de los 80 en general, quedando en una película preponderantemente por y para los aficionados al Heavy Metal.

Aunque en verdad la película también toca otros temas que quedan un poco diluidos en la segunda parte de la película, como el acoso, el rechazo, los ídolos de juventud y la influencia de la música en los jóvenes y su comportamiento.

Lo mejor de la película para mi, el volverme a encontrar con Doug Savant, un actor al que encuentro un gran parecido con Kiefer Sutherland, y al que conocí en Melrose Place, interpretando a un sensible y tímido homosexual, aquí en un rol diferente que le pega mejor con su apariencia física.


Como espectador neutral, no condicionado por un apego incondicional a la música rock, le veo dos grandes defectos a la película. Desde el punto de vista musical, la banda sonora de Heavy Rock, del grupo Fastway, es olvidable, un gran error cuando la trama gira tanto en torno a la música.
Y desde el punto de vista del miedo, los elementos de terror son bastante absurdos y aburridos, eliminando completamente la presencia de sangre y empleando efectos especiales como mecanismos de muerte y de infundir miedo.

Mi consejo es: si no eres amante del Heavy Metal, no lo veas, y si lo que buscas es verdadero terror, tampoco lo hagas.










Valoración:                                  5/10












El carnaval de las tinieblas (1983)

 





A pesar de ser una tradición completamente asentada en nuestro país, y creciente en popularidad, Halloween no tiene excesivo protagonismo en el cine, o no por lo menos en películas un tanto antiguas. Bien sea porque no llevan implícito en el título la reseña a este día, o bien porque realmente no se ha trabajado mucho, más allá de la famosa saga con el personaje de Michael Myers, que empezó allá a finales de los setenta de la mano de John Carpenter, con no sé si seis o siete secuelas.

Buscando mínimamente, encontré en algún sitio que esta podía ser una buena película para ver en Halloween, supongo que porque hubiera disfraces, aunque el título parecía indicar más que fuera una película para Carnaval.

Aunque al poco de empezar la película una voz en off dice "Recuerdo que era Octubre, un mes nada agradable para los niños", con lo cual pensé que menuda coincidencia y acierto a la hora de elegirla, en esa última noche del mes de octubre.
Eso y la similitud del apellido del protagonista con el día en cuestión. Halloway / Halloween son realmente parecidos.


Aunque con los primeros minutos me podría esperar algo parecido a películas que he visto en esta trayectoria en el foro, como Las siete caras del Dr. Lao o El circo del terror, que me gustaron, rápidamente me di cuenta, y tras recordar que la película era de Disney, que no me iba a gustar en exceso.

Y es que las películas de Disney (el rey de la fantasía, un género que bien hecho me gusta bastante), suelen estar marcadas por ser positivas y bondadosas, enfocadas a público infantil o juvenil, y buscando el entretenimiento familiar, y mezclar eso, una película dirigida principalmente a niños con intentar darle un toque de miedo no me encajaba mucho.

Parece ser que alguien más además de yo no estaba contento con el resultado de la película porque Disney hizo muchos cambios en la película, que el escritor Ray Bradbury y el director Jack Clayton no tenían previstos. Muchas escenas de efectos especiales adicionales fueron filmadas por un director de segunda unidad, después de finalizar la producción original, y se realizaron otros cambios antes de su lanzamiento. Según el comentario en disco láser de Bradbury, muchas de sus intenciones originales para la película fueron destruidas.

Todo ello provocó que el estreno de la película se retrasara un año. Bradbury y los realizadores originales no estaban satisfechos con la intervención de Disney ni con los efectos agregados. La película terminó siendo un fracaso cuando finalmente se estrenó en 1983, a pesar de los intentos de Disney de hacerla más amigable para el público.


A pesar de contar finalmente con un muy buen actor como Jason Robards, la película no debía convencer a mucha gente por algunos otros detalles.

Como por ejemplo que Kirk Douglas compró los derechos y originalmente tenía la intención de producir e interpretar el papel del padre, cosa que finalmente no sucedió. Su hijo Peter Douglas permaneció en el proyecto como productor.
También se consideró para el papel de Robards a gente habitual de Disney, como Dick Van Dyke, u otros actores veteranos como Walther Mattau, Jack Lemon, James Garner o Hal Holbrook.

O que Ray Bradbury preguntó tanto a David Lean como a Steven Spielberg si estaban interesados ​​en dirigir la película y también debieron declinar la oferta, o por lo menos no decir que si.


A mi se me hace una película lenta, extraña, que no arranca, que intenta agradar a todos los públicos, pero que como película infantil las he visto mucho mejores, y como película de miedo, simplemente no alcanza para catalogarla como tal.

Apenas intervienen personajes durante la película, y aunque hay escenas con más gente, aparecen en un segundo plano, incluso parece que difuminados, dando la sensación de que la trama transcurre en un pueblo abandonado, o que todo le sucede a las mismas y pocas personas.

El resultado se convirtió, en una película de fantasía de tono negro que a algunos nos parece defectuosa y que definitivamente parezca fechada en el año 2012 en vez de 1983, pero aún así se podría catalogar como una de las películas de Disney más espeluznantes y menos sentimental jamás estrenada.











Valoración:                            5/10












01 noviembre 2023

Baila hasta el amanecer (1988)

 






El otro día fallecía Matthew Perry, uno de los actores más populares de la década de los 90 y también durante el siglo XXI, que curiosamente se hizo popular por una serie de televisión, y no ninguna película, gracias a su papel de Chandler en la longeva y mundialmente aclamada serie, Friends, cuya grabación duró una década y participó en 234 episodios.

Uno de esos actores con grandes problemas de adicciones, que finalmente no pudo superar.

A la par que grababa Friends trabajó en alguna película popular, como Tango para tres o Falsas apariencias, pero su carrera cinematográfica siempre irá ligada a su popular personaje de Friends, y tampoco necesitó tener papeles importantes en la gran pantalla para conservar su popularidad.

Ya vi hace un tiempo su primera película, Una noche en la vida de Jimmy Reardon, de la que prácticamente no guardo ningún recuerdo, así que tenía marcada de hace tiempo, esta su segunda película, y era la ocasión perfecta para verla.


Aunque realmente no sé como su carrera despegó viendo la interpretación en esta película, no por falta de cuota de pantalla, si no más bien por la inexpresividad de su personaje y la falta de vigor y energía en el mismo, aunque entiendo que estaba en el guión que fuera así.

Una película con un elenco de actores jóvenes y prometedores, de los cuales algunos llegaron a alcanzar cierta popularidad, aunque creo que realmente el que más lo hizo fue el propio Perry, a pesar de tener el papel menos destacado en la película. Sorpresivamente todos los actores estaban en una horquilla de edad similar, y no había casos excesivamente chocantes de actores cuya edad real era muy superior a la del personaje que interpretaban.

Por el lado femenino, todas ellas también especialmente conocidas por un papel longevo en una serie de televisión famosa, están Tracey Gold (Los problemas crecen), que a pesar de ser la que cuya carrera menos despegó luego, para los que veamos la película mucho después de su grabación, sorprendería que le quitara el protagonismo a sus otras dos compañeras de rodaje, haciendo de una especie de Cenicienta que se convierte en princesa.

Junto a ella, Christina Applegate (Matrimonio con hijos), que a pesar de no interpretar el papel que quizás más le pegaría lo hace bastante bien, contando aquí con apenas 16 años. Y Alyssa Milano (Embrujadas), una actriz que siempre me cautivó desde que la descubrí en Melrose Place, y que aquí contaba con tan solo 15 años. Ya había aparecido tres años antes en Comando, dando vida a la hija de Arnold Schwarzenegger, y aquí ya había crecido lo suficiente para parecer una jóven muy atractiva, para interpretar a la chica más popular del instituto.

En el lado masculino, quitando a Perry, sus protagonistas Brian Bloom (que también tuvo un pequeño papel en Melrose Place) y Chris Young (no tiene ninguna interpretación desde 1998), no tuvieron tanto recorrido como las intérpretes femeninas, aunque realmente en esta película se lleven los dos mejores papeles (de hecho parece que Chris Young consiguió llevar a la realidad lo que ocurría en la ficción y salir durante un breve período de tiempo con Alyssa Milano).

Juntos a ellos tres actores interesantes más veteranos, que condimentan bien la película, como son Cliff de Young, Alan Thicke y especialmente Kelsey Grammer, uno de los varios actores tan geniales que salieron de la serie Cheers.


La película se basa en un evento muy usado en el cine americano, especialmente en los años 80, como es el baile de la fiesta de graduación de un instituto (igual después de Halloween, Black Friday sea de lo próximo que importemos de América, junto con el día de Acción de Gracias). Pero a pesar de ser un argumento muy utilizado, creo que esta película lo trata especialmente bien.

Yo, personalmente, no me canso de ver este tipo de películas a pesar de que vaya cumpliendo años. Sin recurrir a ningún desnudo y sin utilizar humor especialmente forzado y recargado. Yo recomiendo que no se descarte simplemente por parecer una película adolescente ligera. Tiene algo para todos, los jóvenes, los mayores y los jóvenes de corazón.

Además te deja el buen sabor de boca de que al final los menos favorecidos salen victoriosos.











Valoración:                                   7/10