Mostrando entradas con la etiqueta Cine Yugoslavo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cine Yugoslavo. Mostrar todas las entradas

13 julio 2024

El lado oscuro del sol (1988)

 






Para completar este repaso por los inicios de ese póker de estrellas nacidos a principios de los años 60, (Tom Cruise, Keanu Reeves, Johnny Depp), quedaba por revisar una película de Brad Pitt. Difícilmente podré volver a repeteri este acontecimiento porque de algunos de ellos ya no quedan películas poco conocidos que sigan la filosofía de mi blog.

Lo primero a reseñar es que ésta película es más tardía que las otras tres que propuse, siendo por tanto los comienzos de Brad Pitt un poco posteriores. De hecho lo podíamos acreditar como su primer largometraje, tiene cuatro títulos de crédito como "sin acreditar" anteriormente, en películas conocidas como La tierra de nadie o Golpe al sueño americano.

Ni siquiera había rodado Triunfo amargo (1990), para luego ya encadenar de manera consecutiva sus grandes éxitos, que comenzaron con Thelma y Louise (1991). Es posiblemente del cuarteto que he analizado, el que más películas exitosas haya tenido, porque llegó a encadenar una lista de películas en los 90 que fueron éxito tras éxito

- El río de la vida
- Amor a quemarropa
- Entrevista con el vampiro
- Leyendas de pasión
- Seven
- Siete años en el Tíbet
- ¿Conoces a Joe Black?
- El club de la lucha
- Ocean's eleven
- Troya

Entre otras, superando creo yo claramente a sus compañeros de generación en cuando a número de éxitos en la gran pantalla.


Lo que sorprende es como, una posible estrella en ciernes, o aunque todavía no lo fuera algo de potencial se intuiría, acabara en esta película yugoslava como protagonista. Película que a día de hoy creo que sigue siendo bastante o muy desconocida aquí. Pero un país tan lejano de los Estados Unidos como la antigua Yugoslavia, y además con una película aparentemente extraña, (pero totalmente original y diferente) y sin un resto de reparto destacado tampoco, resulta muy sorprendente.

De hecho la película se editó en 1997 para hacer un reestreno cuando Pitt ya gozaba de un estrellato sólido y consolidado.

Un cine Serbio, cuyo exponente más relevante es Emir Kusturica, nacido en la parte Bosnia de Yugoslavia, y con su película más destacada, El tiempo de los gitanos.

De hecho supuestamente la película se rodó en la localidad de Kotor (hoy Montenegro), y otra de esas curiosidades que me pasan ... al día siguiente una amiga mía que va a ir unos días de vacaciones a Dubrovnik, me pidió si le podía recomendar qué ver por allí. Rápidamente me vino a la mente mi viaje a Croacia de 2013 y uno de los sitios que le recomendé fue Kotor, y su increible fiordo "Las bocas de Kotor", sin yo saber que la película se había rodado allí.
Y para haberse rodado allí me parece poco aprovechado, porque Kotor tiene unas estampas maravillosas que no se ven reflejadas en la película.


Aunque con una enfermedad diferente y no tan dramática, me siento reflejado en el personaje interpretado por Pitt, y quizás por ello me llegue más la película que a otras personas.

Hace un alegato inicial, de "Quiero vivir"

Y luego hay frases en la película que comparto plenamente, como "Me siento un observador de la vida", cosa que comparto, aunque el contexto sea diferente o "Necesito amigos, amor, solo quiero vivir como la gente normal", con la diferencia y la suerte que yo si he podido vivir eso durante bastantes años, gracias a Dios.

Y en general transmite los pequeños placeres de la vida, cosas normales que damos por hechas y por alcanzables para todos, y el aprender a valorar las cosas aunque a la mayoría de la gente le puedan parecer insignificantes, en un alegato de humildad, de valentía y de aceptación de las enfermedades y sus consecuencias.


Pitt transmitió bien al espectador la tortura emocional interna que su personaje sentía al no poder salir al mundo y hacer cosas normales de un joven, y mostró que, aunque llevaba el traje para detener la tortura externa del sol que le quemaba el cuerpo, sus sentimientos internos, que en realidad son más importantes en muchos sentidos, estaban sufriendo constantemente, pero el resto del reparto, o más bien los diálogos (además de una carrera de motos extremadamente ridícula y deficiente) son lo que le restan un poco de valor a esta interesante película.

Una impactante película, en la que se aborda la fé, la religión, el drama familiar y las adversidades de la vida en general, con la también sorprendente presencia de pasajes de Johan Sebastian Bach de fondo.


Una película que cuando empecéis a ver podría daros cierto aire a Batman, y que bien podría haberse llamado El caballero oscuro, y que además curiosamente hay un momento en el que el personaje de Pitt hace un guiño hacia este pensamiento mío y que habrá tenido más gente, apareciendo con una camiseta con el logotipo de Batman.









Valoración:                          6/10