No es un género muy pródigo el de aventuras, ni siquiera en la explosión de los años 80, aunque si que es cierto que la trilogía de Indiana Jones puso en el panorama este género, también es cierto que cualquier comparativa con las tres películas de Spielberg sale mal parada.
De hecho a ésta se la considera dentro de un pack de películas exitosas que se realizó precisamente a raíz de Indiana Jones en busca del arca perdida y que lo componen Sky Pirates (1986), Las minas del rey Salomón (1985), Allan Quatermain y la ciudad perdida del oro (1986), El río de la muerte (1989) y La gran ruta hacia China (1983).
Una película basada en una novela de 1977 de Jon Cleary que iba a dirigir originalmente el ya veterano por entonces John Huston, pero que fue reemplazado por Sidney J. Furie, pero que tampoco fue el director definitivo, que finalmente fue Brian G. Hutton, un director con apenas 9 películas en su trayectoria pero entre las que se cuentan las protagonizadas por Clint Eastwood, El desafío de las águilas y Los violentos de Kelly.
El papel principal recayó en Tom Selleck (aunque sonó Roger Moore), un actor que podría asemejarse a Gary Busey y Nick Nolte a los cuales comparaba recientemente, por edad y tipo de papeles realizados.
Éste fue su primer papel de protagonista y se llegó a pensar en Hollywood que podría convertirse en un nuevo Clark Gable, por apariencia física más bien supongo.
El caso es que quizás éste sea su papel más importante, aunque se llegó a decir que el era el predestinado para el papel protagonista del primer Indiana Jones y que le eligieron para esta película en contraprestación.
La película se rodó prácticamente en su totalidad en Yugoslavia, aunque se ambiente por todo oriente próximo llegando hasta China y según la protagonista pasó mucho frío durante el rodaje en el país yugoslavo.
Una actriz que como a veces suele pasar en este mundillo salió de la película con marido, el segundo asistente de dirección, aunque durara poco la relación.
No es muy común ver aviones en una película de aventuras, y menos aviones tan antiguos, los cuales se llamaban Dorothy y Lilian, en honor a Dorothy Gish y Lilian Gish.
En fin, soy amante del género de aventuras pero la película se me queda un poco sosa en general, aunque es entretenida.
Valoración: 5/10
La gran ruta hacia China en IMDb
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