02 julio 2022

El cazador de gatos (1989)








Por el 75 aniversario de Peter Weller me decidí a ver una película suya.
Se trata de un actor al que ni siquiera muchos sabrán asociar por el nombre, un tanto olvidado (hasta por mi que he visto dos películas suyas desde que empecé este blog y no lo recordaba en ese instante), a pesar de haber protagonizado un personaje mítico en la historia del cine, como fue el policía Murphy en Robocop.

Una película, por cierto, también bastante poco valorada si la comparamos con otras películas de ciencia ficción de los 80, como Terminator o Regreso al futuro, de hecho de estas dos sagas incluso algunos destacan más sus segundas partes, mientras seguramente mucha gente hasta desconozca que se rodó un Robocop 2.

Al parecer no hubo muy buena sintonía entre el trío protagonista durante el rodaje. Los roces o encontronazos fueron entre el director Abel Ferrara y Kelly McGillis y también entre la pareja de actores protagonistas.

Un Abel Ferrara, director con buen prestigio, del que yo ya había visto cosas, como la interesante Ciudad del Crimen, del que muchos afirman que es una película indigna para ser suya.

Aunque el comienzo en un complejo hotelero, en primera línea de playa y con una aparente pinta de ser veraniega, playera o entretenida, se convierte en pesada, un poco complicada de seguir y poco interesante.
De hecho estaba un poco cansado, cosa que nunca evalúo a la hora de elegir película, y que deberé repensar a partir de ahora, y evidentemente no era la mejor película para un estado de cansancio avanzado y bien entrada la noche.

Es una película un tanto confusa y desordenada, no sabiendo muchas veces donde se está desarrollando cada escena, si en EEUU o República Dominicana, ya que sólo hay una escena de viaje y luego se mezclan las escenas ambientadas en ambos países sin ningún tipo de pausa para interpretarlo.

La película finalmente se va hundiendo debido a una combinación de locaciones poco interesantes (salvo las iniciales) y una historia que después de los primeros veinte minutos tiene muy poco sentido. 
Supuestamente el rodaje preliminar duró 157 minutos, obviamente, se suprimieron muchas escenas en la sala de edición, pero si ya se me antoja difícil de digerir con 90 minutos, no quiero ni pensar con 2 horas y media.

Alguien pensó que con el dúo protagonista, incluyendo el aliciente de la desnudez de Kelly McGillis, más la adición del muy buen actor Charles Durning ya era suficiente para que el resultado fuera un producto interesante, pero nada más lejos de la realidad, y casi el resto del reparto es bastante flojo.

No es una gran película, pero no es horrible, no obstante el letargo y el aburrimiento ganan.










Valoración:                                       4/10














26 junio 2022

Chicos de fuego (1989)

 




Me puse a ver esta película sin saber que iba también sobre playa y verano, y evidentemente verla inmediatamente después de El Salvavidas, hace que me parezca floja, cuando seguramente en otras circunstancias no me habría disgustado.

El caso es que a priori tiene un buen cocktail de ingredientes, aunque no lo es menos que hay bastantes películas parecidas, pero el tener como hilo conductor el surf, un género que no abunda mucho en el cine, es un aliciente.

Pero evidentemente también si comparas el surf en la película El gran miércoles y el que se ve aquí, tampoco deja bien parada a esta película.

Aquí una lista de películas sobre surf para los amantes del subgénero



Junto al surf, se añaden a la receta la playa, fiestas juveniles nocturnas, música interesante, acción, chicos y chicas guapas, algunas dosis de humor ... pero por el contrario también se puede poner en la balanza como negativo la historia tan común y previsible y los diálogos bastante flojos.

Quizás el director sea el más destacado de toda la película, ya que en su primer film dirigió la muy conocida película Los chicos del maíz.
Entre los actores hay caras más o menos conocidas, pero ninguno de ellos llegó a desarrollar una carrera importante.

Tiene un gran paralelismo con la película que vi hace no mucho Patinar o morir, simplemente cambiando el deporte protagonista, del patinaje al surf.
Un par de películas con rasgos de Romeo y Julieta y posiblemente con algo de inspiración en ellas en su guión.

Un actor que estuvo como extra en la película comenta en IMDB que está sorprendido de lo bien que lo califican los pocos usuarios de que la han votado. 
La trama es muy estándar, alternando entre una competición de surf y un romance a primera vista. Algo bastante soso. Durante el rodaje la mayoría del equipo sabía que estaban creando una película floja.


Si no eres gran aficionado al cine de los 80 posiblemente te resulte una película del montón y prescindible.









Valoración:                                       5/10













23 junio 2022

El salvavidas (1976)

 




Siempre cuando llega el verano me gusta ver alguna película relacionada con el mismo, que me anime, que me haga estar positivo, que me haga imaginar o soñar con algún plan de vacaciones ... aunque también a veces me ponen un poco melancólico.

Hace un par de años me marcó Un amor de verano (aunque ya la había visto) y el año pasado Un trabajo veraniego, y ésta que conseguí recientemente gracias a mis amigos de Exploradoresp2p, me entró por los ojos desde el principio, y pensé que sería mi película veraniega de referencia este año, y vaya que si estaba en lo cierto.

Son películas que te transportan a la juventud, o a las vacaciones pasadas y que te dan ganas de revisionar con frecuencia, por lo menos una vez cada verano.

Lo lógico es relacionarla rápidamente con Los Vigilantes de la Playa, pero no tiene nada que ver, son los 70, la sociedad es diferente, no se ha producido todavía la segunda explosión demográfica, todo es diferente, y además la película tiene mucha sustancia, no es cualquier película de los 80 sobre playa para pasar el rato, sin mucho argumento, y no es como Los Vigilantes de la Playa que no deja de ser una pasarela de chicas guapas en bikini, así que no permitas que una impresión negativa de Baywatch te haga ignorar y no ver esta película.

El director captura perfectamente un ambiente relajado y placentero del sur de California, 
hace un buen uso del hermoso paisaje costero y, lo que es más importante, aporta un toque discreto.

Casi me recuerda más a la película El gran miércoles, también ambientada en la playa, pero también con mucho trasfondo e intentando generar en el espectador la disyuntiva entre buscar el mejor trabajo posible o buscar el trabajo que más te guste, que más tiempo libre te deje o que más te permita disfrutar de la vida.

Evidentemente hay chicas atractivas en la película, como la guapa Anne Archer o Kathleen Quinlan, pero su papel no es el de mostrar su cuerpo sin más, eso quizás si se le pueda etiquetar a Sharon Clark, pero su papel es bastante residual y al principio de la película, con lo cual luego queda en el olvido.

Además la película me dio la oportunidad de detenerme más en un actor como Sam Elliot, al que apenas recuerdo haber visto papeles importantes. Un actor de la misma generación que dos actores que me gustan bastante como Gary Busey y Nick Nolte, menos rudo eso sí, pero que me ha dejado una gran impresión, aunque seguramente también he de decir que no creo que tenga otra película en su filmografía que me guste tanto como ésta.


El salvavidas trata sobre numerosos temas importantes con los que todos podemos identificarnos, como el envejecimiento, las opciones de carrera profesional, la crisis (temprana) de la mediana edad, la masculinidad, mantenerse fiel a uno mismo, la responsabilidad, el amor, el sexo, la competencia en lo que hacemos, las consecuencias y mucho más.
Se da valor a no dejarse influenciar por la desaprobación de los demás hacia tu trabajo o tu modo de vida.

El reflexivo guión explora con admirable profundidad e inteligencia el concepto central de cómo la vida se trata de elecciones, o como decía el slogan de un anuncio de helados, la vida es cuestión de prioridades.
Puedes dejar pasar un gran trabajo o una gran mujer, pero no puedes dejar pasar la vida sin disfrutarla al máximo, hacer lo que realmente te gusta, y no lo que los demás creen que deberías hacer, ser tú mismo y no dejarte influenciar por el que dirán, si no sólo hacer lo que tú consideres mejor para ti.

La película es muy apropiada para aquellos que quieran dar un cambio a su vida y necesiten un empujón y nos puede hacer replantearnos o analizar muchas circunstancias de nuestras vidas.

¿Es el salvavidas un trabajo de adultos? 
¿Qué significa ser un adulto, de todos modos? 
¿Quién decide cómo las personas deben vivir sus vidas?


Estas son algunas de las preguntas examinadas en esta película magníficamente escrita de un hombre que tiene que tomar decisiones.
No son problemas que cambiarán el mundo, sino el tipo de pequeñas decisiones con las que luchamos todos los días. 

¿Qué es realmente importante? 
¿Por qué hacemos lo que hacemos? 
¿Quién influye en cómo nos comportamos? 
¿Deberíamos conformarnos porque eso es lo que la gente quiere de nosotros?


A pesar de que la película tiene más de 40 años y el mundo y la sociedad eran muy diferentes, es un claro ejemplo de los pocos que hay hoy en día, de como hay algunas personas que sobreviven a la tendencia del consumismo, capitalismo y materialismo extremo, y decide poner el dinero en un segundo orden de prioridades, aunque realmente es algo difícil de conjugar hoy en día.


Una joya secreta de los años 70 (que cada día me agradan más a nivel cinematográfico), una película con profundidad, sobre un estilo de vida alternativo que tuvo poco impacto en la taquilla en 1976, pero a lo largo de los años ha adquirido seguidores leales y seguramente en Estados Unidos sea hasta una película de culto.













Valoración:                                       8/10














12 junio 2022

Viaje Final (1977)

 








Revisando cumpleaños del día vi que Robert Englund cumplía la redonda edad de 75 años y decidí buscar algo suyo para ver.
Un actor con orígenes etnográficos diversos, pero especialmente sueco, de donde es claramente su apellido y también su apariencia física, con pelo rubio y ojos azules.

Podríamos decir que si las estrellas de la primera etapa del cine de terror en Hollywood fueron Bela Lugosi, Boris Karloff o Lon Chaney, y que en los 60 y 70 fueron también claramente Vincent Price, Christopher Lee y Peter Cushing, para mi Robert Englund es uno de los mayores exponentes del cine de terror a partir de los años 80, no solo por su mítico personaje de Freddy Krueger en la saga de Pesadilla en Elm Street, una auténtica saga de culto, si no por más papeles y por su caracterización y actuación general, siempre medio triste, medio enigmático, incluso en sendos episodios de mis series de cabecera como son Macgyver o El coche fantástico hace papeles de misterio o miedo.


Pero evidentemente los inicios suelen ser diferentes al resto de la carrera de un actor y en este Viaje Final, el digamos que está en un viaje inicial, igual que podría serlo también para Susan Sarandon (aunque además de como actriz, aparece como co-producer en los títulos de crédito de esta pelicula), ambos contemporáneos y rozando los 30 años, mientras que para el protagonista, Henry Fonda, si que podría ser casi el último viaje de su carrera cinematográfica, aunque todavía realizó alguna película más, pero por mucho que aquí se empeñen en caracterizarlo como que tenía 60 años, ya superaba los 70 y no le quedaba mucho tiempo de vida.


Un Henry Fonda, que sin ser tan reconocido como otros actores de Hollywood de su época, fue de los más versátiles, ya que no rehusó ningún tipo de género y era habitual verle tanto en películas de cine negro, como westerns, como películas bélicas y varias películas de desastres ya en su vejez en la década de los 70. 
Pero su gran capacidad para la interpretación tampoco le impide aceptar esta película (la única de este director), en la que digamos se ridiculiza un poco a si mismo y muestra una faceta muy diferente a la de la mayoría de la carrera de Fonda.


La verdad es que la película es extraña, a pesar de que me da cierto aire a la que vi no hace mucho Dos hacia California, una especia de Road Movie - Comedia en la que tiene presencia la prostitución, y el final también me dio un cierto aire a Convoy, la película de culto por excelencia sobre camiones.




Pero ninguno de los principales estudios hizo una oferta para adquirir esta película de la productora Mar Vista Productions. Consideraron que la historia de un camionero que muere de cáncer era tan deprimente que sería difícil de comercializar. Y cuando alguien la adquirió decidió cambiar la imagen del personaje de Henry Fonda para endulzarlo un poco y con el la película.











Valoración:                                      5/10














01 junio 2022

Barcaza a la deriva (1975)

 




El otro día fallecía el actor Bo Hopkins, uno de esos secundarios buenos para mi, que siempre aportan calidad a las películas en las que aparece, aunque seguramente mucha gente no lo conozca.

Como a otros muchos, la primera vez que lo vi fue en un episodio de El Equipo A, cuando era niño y pensaba que los actores que salían ahí eran solo de series y no de películas, hasta que los veía en alguna película y me sorprendía.
Y es en El Equipo A aparecían muy buenos actores como "Special Guest Star", y curiosamente en esta película hay otros dos actores que conozco de allí, especialmente Clifton James.

Un actor que interpreta indistintamente a personajes que representan la ley como a villanos, aunque a mi me pega más en el lado que está al borde de la ley.

Su época de mayor auge fue en los 70, donde intervino en un buen número de películas, especialmente dos que fueron nominadas al Óscar a la mejor película, American Graffiti (1973) y El expreso de medianoche (1978). 

En los años 80 se encasilló más en TV Movies y series de televisión, y además de en El Equipo A apareció en otras reputadas series como Los Ángeles de Charlie y Dinastía, aunque también siguió participando en largometrajes menos importantes como por ejemplo una que vi no hace mucho, Pesadilla en Canyonland (1988).

He buscado una película en la que pudiera ser protagonista y extrañamente he visto que tenía esta película desconocida, a pesar de estar un importante actor como Nick Nolte, uno de esos rudos actores que me gustan mucho como Gary Busey, a los que considero bastante parecidos.

El caso es que Nolte todavía no era alguien muy importante, ya que todavía no había participado en ningún largometraje, el primero sería su siguiente trabajo en una película que vi y comenté, Retorno al Condado de Macon (1975).

Pues además de ser una TV Movie, con una duración excesivamente corta, no llega a 70 minutos, la película además comienza de manera rara, muy gris, sin una trama aparentemente clara que te permita meterte en la película o que capte tu atención, y aunque luego se aclara un poco, no deja de tener ese tono gris o de oscuridad, unido a que con ese metraje tiene poco contenido y rápidamente te encuentras en el final de la misma.

Otra película semi rural estadounidense (Arkansas), típica de los años 70, pero con bajo presupuesto y pobre puesta en escena.









Valoración:                                    5/10













28 mayo 2022

Paro clínico (1992)

 




Ayer fallecía repentina e inesperadamente Ray Liotta. Un actor con un nombre y una cara tremendamente familiar y popular, a pesar de que su filmografía no lo sea tanto, o no por lo menos en mi opinión, y es que tuve que irme a la década de los 90 para encontrar una película no muy conocida, en la que fuera más o menos protagonista para rendirle homenaje, ya que en la década de los 80, en la cual habría tenido una edad ideal, apenas daba sus primeros pasos.

Nacido en Nueva Jersey, a los 6 meses fue adoptado por una familia en la que su padre era de origen italiano, del que tomó su apellido, y su madre de ascendencia británica. Uno de sus primeros recuerdos es cuando ayudó a sus padres a elegir a Linda, su hermana, en un orfanato cuando tenía tres años.

Luego se enteró que él era también adoptado y más mayor contrató un detective para dar con su madre biológica, también de ascendencia británica (quizás por eso fuera un gran aficionado al Tottenham de la Premier League), descubriendo que tenía una hermana también.

Irrumpió en el cine con la comedia negra Algo salvaje (1986), que le valió excelentes críticas. Melanie Griffith (entonces casada con Bauer, con el que Liotta tenía gran amistad) lo recomendó para el papel. Tras el éxito Algo salvaje (1986), recibió más ofertas, pero las rechazó para evitar ser encasillado. En cambio, hizo "pequeñas películas" como La fuerza de un ser menor (1988), que le valió subir su reputación y Campo de sueños (1989), cuyo éxito le sorprendió mucho. Cuando escuchó que Martin Scorsese estaba haciendo el casting de Uno de los nuestros (1990), presionó mucho por el papel de Henry Hill. El gran éxito de la película le trajo una gran popularidad y le permitió obtener protagonismo en futuras películas.

Y después prácticamente vino esta película que he elegido y luego una carrera más prolífica, sólo que no soy muy seguidor del cine a partir de la segunda mitad de los 90.

A pesar de interpretar con frecuencia personajes violentos en la pantalla, afirma no haberse metido en una pelea en su vida.

Algunos de los papeles importantes que estuvo a punto de conseguir pero finalmente se esfumaron fueron en Instinto básico, en Tango y Cash el papel que finalmente hizo Kurt Russell o cuando era más joven en Fiebre del sábado noche.


En esta película con un gran reparto comparte el protagonismo con Kiefer Sutherland, el hijo de Donald, aunque uno de esos actores que no queda del todo bien decir el hijo de, porque aunque su padre es un gran actor, creo que él se ha labrado una buena carrera y lo podría haber hecho igualmente sin que su padre sea un gran profesional de la actuación. De hecho hace un guiño a una escena de su padre en la película de M.A.S.H.


Completan el reparto Forest Whitaker (ese al que durante mucho tiempo confundía con Laurence Fishburne), Lea Thompson, de la que encadeno dos películas casi seguidas, el gran Eli Wallach (Los 7 magníficos), Noble Willingham (Walker Texas Ranger), John Mahoney o un actor poco valorado como John C. McGinley (quizás su nombre artístico no ayude), al que yo asocio principalmente a la película de Steven Seagal, En tierra peligrosa, pero que ha trabajado en muy buenas películas como Le llaman Bodhi, Nacido el 4 de julio o Seven.


Una película sobre médicos u hospitales que no suelen ser muy habituales pero si que hace asociarla con la serie Urgencias, que yo nunca llegué a ver, pero que cada vez que sonaba su sintonía me hacía sentir bien. 

Precisamente John Mahoney, Keith David, Forest Whitaker, Eli Wallach y Troy Evans aparecieron en Urgencias (1994), aunque Evans fue el único actor que era un miembro habitual de la serie.

Una denuncia sobre la burocracia en la sanidad una alabanza de aquellos profesionales cuyo primer y casi único objetivo es salvar vidas y ayudar al paciente en todo lo posible, muy por encima de ganar dinero, tener una consulta privada o cumplir con esa burocracia por encima del sentido común o la emergencia de los pacientes.







Valoración:                                   6/10








23 mayo 2022

Perdida en el desierto (1988)

 




Sin haberlo planeado retomé el cine australiano con esta película medio de Aventuras, medio Comedia, con algún tinte de acción, aunque también lo podríamos calificar como un Western Australiano.
Y otra vez esa Australia rural que tanto me ha gustado en otras ocasiones y que me invita a pasar un buen rato, disfrutando de algunos de sus paisajes y del enfoque de sus películas.


Alguno podría pensar que más allá de que se vea que los coches se conducen a la derecha y la aparición de un gracioso y amable canguro, por el resto podría ser una película americana sin más, pero yo creo que hay bastantes más aspectos que la identifican con Australia, quizás basándome en el bagaje de películas que ya he visto con ciertas similitudes, pero el color ocre del desierto es muy característico, así como los personajes tampoco parecen habitantes de Texas, Utah o California.


Una TV Movie totalmente desconocida, y que quizás sólo lleguemos a ella los que rascamos a fondo en los 80, o en el cine australiano, o simplemente en películas de aventuras o ambientadas en el desierto.


Dirigida por John Llewellyn Moxey, director americano nacido en Argentina, que empezó dirigiendo algunos largometrajes (en los cuales aparecía solamente como John Moxey en los títulos de crédito), seguramente el primero el más famoso de su filmografía, El Hotel del Terror (1960), pero que el resto de su carrera prácticamente estuvo dedicada a episodios de series y a TV Movies, predominando siempre sobre el resto de géneros las de Terror y las de Ciencia Ficción.


En el reparto solo contaba con la semi conocida Donna Mills en el papel protagonista, de la que ya había visto alguna película recientemente sin acordarme (El bosque en llamas y Waikiki), y que tiene la característica de interpretar personajes más jóvenes de lo que en realidad ella es (aquí tenía 48 años y parece bastante más joven). 


Irremediablemente me hace recordar otras películas australianas parecidas, que me hicieron pasar un buen rato y que a veces me dan ganas de volver a ver, como Razorback, The Coca Cola Kid o Carretera Mortal, algo mejores que ésta y en las que la Australia rural o interior también es el escenario en el que se desarrollan las mismas.









Valoración:                                       5/10













13 mayo 2022

Jóvenes alocados (1984)

 






Quizás ésta parezca una típica película ochentera más, y no le faltará razón a la gente que lo piense así, ya que el hilo principal de la misma es bastante común en esta época. Pero yo creo que como algo diferencial está el buen reparto y la buena música (compuesta por Edward Van Halen).

Y quería resaltar dentro del reparto a Chris Penn, hermano pequeño del superexitoso Sean Penn, con un grandísimo parecido físico y de actuación aquí.

Aunque nunca recibió tanta atención ni tantos premios como su hermano Sean, Chris Penn siempre será recordado por aquellos que vemos películas de los 80.
De hecho en estos años 80 su carrera y la de su hermano Chris no tenían mucha diferencia de reconocimiento, trabajando Chris en buenas películas y con buenos actores como Tom Cruise o Kevin Bacon, mientras su hermano en aquella época era casi más conocido por su romance con Madonna que por su carrera de actor.

Esta película guarda una gran conexión con Aquel excitante curso, protagonizada por su hermano Sean, y cuyos papeles tienen una gran similitud. En aquella también trabajó curiosamente Eric Stoltz con un papel más secundario. Se la considera a esta Jóvenes alocados como una secuela de la otra. El guión de ambas es de Cameron Crowe.

Su carrera siguió una buena línea hasta quizás su punto culminante con Reservoir Dogs, de Tarantino, después de la cuál sus papeles no fueron principales, o en grandes películas o por lo menos películas de éxito, quedando en una segunda fila.

Falleció con sólo 40 años por problemas de corazón mezclados con gran consumo de drogas.


El resto del reparto lo completan Eric Stoltz, que hace de personaje opuesto a Penn, Lea Thompson, que siempre asocio a Regreso al futuro, el gran Rick Moranis, de Cazafantasmas por ejemplo (estos tres talentosos actores que estaban casi comenzando y siempre me gusta ver películas de actores que han llegado a famosos antes de serlo o justo en su debut) y Randy Quaid.
Aunque yo realmente llegué a la película gracias a Kevin Peter Hall, otro actor fallecido prematuramente, y que aunque muchos no lo sepan, fue el que dio vida a Alien y a Depredador, por su increíble estatura.

De hecho, Eric Stoltz iba a protagonizar la película Regreso al futuro como Marty McFly y en realidad había filmado semanas de metraje, pero fue reemplazado por Michael J. Fox. Si Stoltz se hubiera quedado, habría coprotagonizado con Lea Thompson, solo que esta vez ella habría sido su 'mamá' y no su novia. Volverían a compartir pantalla en Una maravilla con clase de 1987.


Una de esas películas de las que no hay que esperar un premio ni nada por el estilo, sino sólo ganas de verla y pasar un buen rato. 
Una película para sentirse bien sobre básicamente nada, solo te hace reír de lo mucho que los personajes hacen en esta película, solo buscando diversión y no un premio de la Academia.
Quizás hoy en día las películas tratan de tener mucha historia y resultan poco divertidas.

Una de esas películas que ves no por la historia (ya que en realidad no hay una trama única que dirija a los personajes), sino simplemente porque puedes divertirte con la serie de personajes diferentes y dispersos que desfilan por la misma.

Si eres fan de las películas de los 80 sin sentido, pero divertidas y aún no has visto esta, no dejes de verla.

Apaga tu cerebro por un rato y disfruta.











Valoración:                                    6/10













30 abril 2022

Un instante, una vida (1977)

 





Cumplía 82 años Al Pacino, uno de los actores más reconocidos e importantes del último medio siglo, y decidí bucear entre su filmografía, no excesivamente extensa, a ver si encontraba alguna película poco conocida que ver y me encontré, con ésta sorprendentemente semi desconocida, para ser una película dirigida por Sidney Pollack y con un ya afamado Pacino después de haber interpretado ya a Michael Corleone en las dos primeras secuencias de El Padrino.

Desde el punto de vista de Pollack, ganador de un Óscar por la también romántica Memorias de África (aunque a mi su película que más me gusta es Las aventuras de Jeremías Johnson), dijos obre la actuación y caracterización del actor Al Pacino en esta película que Al era "uno de los pocos actores que podía interpretar a un hombre aparentemente pasivo y poco interesante, y que no fuera aburrido de ver".

Para interpretar el papel de Lillian, el director Sydney Pollack entrevistó a docenas de actrices europeas, mientras que Pollack también vio docenas de cada una de sus películas. Los criterios para el personaje de Lillian eran una actriz europea multilingüe con una presencia eléctrica y con la bonificación opcional de haber tenido exposición en películas estadounidenses. Marthe Keller hablaba con fluidez francés, alemán, italiano e inglés. La actriz suiza también había aparecido en dos películas estadounidenses, Domingo negro (1977) y Marathon Man (1976). Catherine Deneuve deseaba desesperadamente el papel de Lillian, pero se quedó sin él.

Al Pacino no sabía conducir un automóvil antes de esta película. Tuvo que tomar lecciones de manejo antes de poder conducir en las escenas de carrera.
Fue nominado a un Globo de Oro al Mejor Actor de Película por su actuación en esta película, pero no ganó. La nominación fue uno de los pocos premios que recibió la película.
Al Pacino y Marthe Keller mantuvieron una relación personal en la época y después de que se hiciera y estrenara esta película.

A Paul Newman se le ofreció originalmente el papel principal. Lo consideró, pero finalmente decidió que no era para él. Teniendo en cuenta que Newman era 15 años mayor que Pacino, creo que no habría encajado bien en ese papel de piloto de carreras, porque ya es difícil ver pilotos que pasen los 40 años, cuanto más que pasen los 50.



La podíamos catalogar como una joya perdida, pero quizás poniendo joya entre comillas, porque la película no tuvo las mejores críticas y tan pronto te puedes encontrar alguien que la ensalza mucho como alguien que la tilda de insoportable y la peor actuación y película de Pacino.
Pero bueno, tiene esa parte de joya por ser una película de Pacino poco conocida, justo post El Padrino, y para mi por esas localizaciones en sitios tan bonitos en los que he estado como Florencia, Bellagio y el Lago de Como, vistos diferentes en los años 70, y por supuesto ese hueco que tiene el Circuito del Jarama en la película.

Bien es cierto que el que espere una película sobre carreras de coches se va a decepcionar, porque aunque comienza con ella, rápidamente se diluye en un drama romántico, y tan solo vuelve a aparecer brevemente a lo largo de la misma.

La película está basada en la novela Heaven Has No Favourites del alemán Erich Maria Remarque que se publicó en 1961 y su protagonista no era estadounidense. Supongo que para filmarlo y asegurar la taquilla, el protagonista se cambió a un estadounidense y se eligió a una estrella estadounidense en ascenso. 

Es uno de los romances menos convincentes en la historia del cine, donde no puedes creer que ella esté con alguien que encuentra tan inútil, y no puedes creer que él esté con alguien que lo pone tan nervioso.


Como detalle final, el piloto de carreras de la vida real José Carlos Pace, anunciado como Carlos Pace, hizo de doble de Al Pacino en las escenas de carreras de autos (Pacino conducía el coche real de este piloto). 
Pace murió en un accidente aéreo en Sao Paulo poco después del comienzo de la temporada de 1977. Tenía 32 años. Esta película estaba dedicada a él.










Valoración:                                 6/10














02 abril 2022

El autobús atómico (1976)

 





Soy bastante seguidor de las películas cuyo hilo conductor es alguno de los medios de transporte terrestre que existen, especialmente coches y motos, que son las que más abundan, pero por ejemplo de camiones hay un par de películas que me fascinan, como son Convoy y Carretera mortal. 
Así que al ver ésta que versaba sobre un autobús decidí verla para ampliar el abanico de medios de locomoción.

Viendo el comienzo parecía que me iba a encontrar con una película de desastres, tan típicas y abundantes en los años 70, de hecho en el preámbulo de la película se puede leer


"Ha habido películas sobre grandes terremotos... 
 Ha habido películas sobre grandes barcos que se hunden... 
 Películas sobre grandes edificios en llamas... 
 Películas sobre grandes globos alemanes que revientan... 
 Y ahora una película sobre... . . " 


Pero estamos ante una comedia de humor absurdo, una parodia sobre esas películas de desastres de la época y sobre algunos personajes de la sociedad, y he de decir que aunque no soy nada seguidor de ese tipo de humor, esta película me ha conseguido hacer reír y el conjunto completo de la misma me ha parecido interesante.

Según un artículo de la revista de autobuses "Bus World", en 1976, el gran autobús real de esta película 
hizo un viaje real en California desde Los Ángeles a San Diego para promocionarla.
El coste  para construir el vehículo fue de alrededor de 250,000 dólares de la época.
El autobús real utilizado para esta película había sido parte del desfile del bicentenario de la ciudad Los Ángeles en 1976.

Para la gran llegada del gran autobús, se tuvo que levantar el techo de una estación de autobuses en el centro de Los Ángeles, para que el gigantesco autocar pudiera ingresar a las instalaciones.
El autobús, llamado cíclope por su gran faro central, tenía 32 ruedas, pesaba 75 toneladas y medía 106 pies de largo. Era articulado, de dos pisos y de propulsión nuclear.

Pero en realidad, el autobús era en su mayor parte un caparazón vacío que contenía solo los aparatos mecánicos necesarios para operarlo. El salón del piano, visible encima del compartimiento del conductor, fue la única pieza escenográfica instalada en el autobús y solo se construyó parcialmente.


Sí, "El autobús atómico" fue el predecesor de la larga y lujosa lista de parodias de desastres. Se la compara mucho con "Aterriza como puedas", algunos incluso diciendo que se basa en ella, cuando esta película es cuatro años anterior, y otros en cambio no entienden porque no tuvo tanto éxito como la otra.

El guión, la dirección y la actuación son buenos y los efectos especiales son de primer nivel tratándose de los años 70.

Definitivamente una película divertida y divertida. Súbete a este "Autobús".










Valoración:                                     6/10














31 marzo 2022

La estación de la bruja (1972)

 





George A. Romero es un director de culto desde que a los 28 años dirigió su película más conocido y una de las de más renombre del cine de terror, La noche de los muertos vivientes.
Nacido y crecido en Nueva York, su padre nació en España y se crio en Cuba, y su madre era lituana.

Su famosa película, fue rodada en blanco y negro con un presupuesto de poco más de 100.000 dólares. La visión de Romero, combinada con un guión sólido escrito por él y el cofundador de su productora "Imagen", John A. Russo permitió que la película recuperara mucho más de lo que costó y se convirtió en un clásico de culto a principios de la década de 1970.

La combinación del director con el tema de la brujería me parecía un buen binomio para ver una película de terror que hacia tiempo que no veía.
Pero a pesar de que esta película es de George A. Romero y se vende como una película de terror, no es realmente una película de terror y los aficionados rígidos al terror pueden terminar decepcionados.
O, al menos, no es una película de terror directa y cualquiera que que esté esperando el gore y el suspense típicos de Romero se sentirá decepcionado. 
Lo más cerca que se acerca la película al terror típico son algunas secuencias maravillosamente espeluznantes que involucran a un hombre con una grotesca máscara de goma de aspecto satánico 
que intenta irrumpir en la casa del personaje principal.

Esta película se reduce a la historia de una mujer que se siente insatisfecha con el trabajo diario de su existencia como esposa respetable en un suburbio respetable. 
Se siente envejecer. Está secretamente amargada con su esposo y sus amigos. Nunca está realmente claro lo que quiere exactamente porque no parece conocerse a sí misma, pero se siente intrigada por una mujer en el vecindario que dice ser bruja. 

La película no funciona como película de miedo ni casi como película pero misteriosamente tiene cierto enganche por su cadencia intrigante.
Según comentó Romero ya en 2002, ésta es la única de sus películas que le gustaría rehacer. 
Citó la falta de dinero como un motivo de descontento con esta producción.

Se rodaron 4 horas de metraje, y yo esperaba ver una película de más de dos horas, pero la que tengo apenas dura hora y media, lo cual no sé si significa que se han cortado cosas interesantes o que mejor así y que no durara más porque se me podría hacer al final muy pesada.

Sin actores importantes, además por ejemplo la actriz principal no hizo carrera más allá de esta película, a pesar de que su actuación me parece muy buena, con un rostro imperturbable sin apenas mostrar expresión pero que conecta muy bien con el espectador. Ella estaba haciendo anuncios comerciales cuando la contrataron para esta película.

Se metió muy bien en el papel, hasta con la anécdota de que cuando estaba rodando una escena en la que decía "Soy una bruja", el techo se rompió. Romero atribuyó esto al calor de las luces, pero dijo que algunas personas en el set de rodaje se asustaron un poco. 



Para aprovechar al máximo esta 'Season Of The Witch', ignora la etiqueta de terror y deja las películas de zombis de Romero fuera de tu mente cuando te dispongas a verla.









Valoración:                                  5/10













28 marzo 2022

Dos hacia California (1981)

 




Llegué hasta esta película por M. Emmet Walsh, un actor secundario que cumplía 87 años, que puede ser la edad que aparenta desde hace 20. Con una larga filmografía me parece un gran actor secundario poco reconocido quizás por un pequeño hándicap, que sus papeles, como en esta película, son excesivamente cortos.


En un principio es una película que choca por el hecho de ver a su protagonista masculino trabajando en una especie de comedia romántica, ya que hasta ahora sólo le recordaba en papeles de tipo duro, y por ver a su protagonista femenina en un papel que quizás no sea con el que más se la pueda asociar.

El director Martin Ritt dijo una vez, que culpaba del fracaso de esta película a su guión y a la incapacidad de Tommy Lee Jones y Sally Field para llevarse bien y trabajar bien juntos.
Se dice que fue un lunar para ambos en una clara trayectoria ascendente dentro de sus carreras profesionales.

El director y Sally Field colaboraban de nuevo tras la exitosa Norma Rae (1979), que ganó dos Premios de la Academia, uno de ellos para Field (los dos actores protagonistas tienen estatuilla de la academia). 
Volverían a formar equipo por tercera y última vez con El romance de Murphy (1985), que coprotagonizó James Garner.


Los personajes no resultan muy interesantes. Intenta abrir una alternativa para el personaje de Sally Field, con la presencia de un hijo, pero no se desarrolla y queda en vía muerta. No aprendemos mucho sobre ellos, y sus frecuentes disputas finalmente se vuelven agotadoras. Además, cuando la película termina, termina en un punto en el que parece inacabada. 
Como dijo el director: "Tenemos un tiempo de ejecución de 90 minutos, así que demos por terminado el día"

A pesar de la presencia de la recientemente oscarizada Sally Field y de añadirle un pujante compañero de reparto como Tommy Lee Jones, más algunos buenos secundarios, la película cayó rápidamente en el olvido, y podíamos considerarla una de esas "películas desconocidas" o "películas ignoradas".


De todas maneras yo soy un apasionado de la Road Movies y me ha parecido una buena película descubierta. Situada a mitad de camino entre ellas, me resulta parecida y como si fuera una mezcla de "Dos hombres y un destino" y "Thelma y Louise", sustituyendo a dos protagonistas del mismo género por uno de cada. Una road movie con toques de drama y de comedia romántica, de dos estereotipos de la sociedad de aquella época en busca de nuevas y mejores oportunidades y buscando la tierra donde los sueños se cumplen.









Valoración:                              6/10













23 marzo 2022

Lío en el instituto (1987)

 




A veces no hace falta ningún aliciente para pasar un buen rato o para que una película sea entretenida.
Como hacía tiempo que no veía una película de los 80, elegí una bastante típica, de ese subgénero predominante en el cine de los 80, como son las películas de instituto o universidad, con el añadido que hasta ahora no había visto en otras películas, el intercambio de alumnos.

Aquí un par de listas con películas relacionadas



Y es que una TV Movie ya implica poco presupuesto, pero además con pocas localizaciones diferentes y apenas actores conocidos en ese momento, aunque alguno de ellos luego progresara hasta un status interesante como Rob Estes, Maura Tierney o Heather Graham, aunque ninguno de ellos en los papeles protagonistas, que recayeron sobre dos actores bastante poco conocidos.

Quizás el elemento de más renombre en la película sea el de O.J. Simpson, ese jugador de fútbol americano luego reconvertido a actor y principalmente conocido por motivos extradeportivos y extracinematográficos.

Ni siquiera tiene una BSO interesante, y realmente lo que le da valor a la película es su argumento,
y como con ningún aliciente extraordinario consigue un producto decente.

Disney produjo esta película como parte de su selección del mundo mágico de Disney.
Como a mi también me pareció y he leído en una reseña, ambos protagonistas muestran un parecido
sorprendente con la calidad de George McFly de Regreso al futuro.

El hilo principal es el miedo a no gustar y la necesidad de hacerte presente y notorio en esa edad
y esa época de nuestras vidas.
Este miedo es tal que nace la motivación para asumir una nueva identidad, un cambio radical en nuestras vidas. 
Una divertida historia que termina con una sentida moraleja. 
Aunque la ambientación es de los años 80, la temática es universal en el espacio y el tiempo.








Valoración:                               6/10













05 marzo 2022

La dinastía del petróleo (1957)

 





Revisando los cumpleaños del día me topé con Stanley Baker, bastante abajo en popularidad eso sí, y no tuve dudas en elegirle a él como protagonista para mi película de ese día.

Un actor que me guarda un gran paralelismo con otro de mis actores favoritos, Stephen Boyd.
Ambos eran británicos, nacieron con tres años de diferencia, y murieron en años consecutivos sin alcanzar los 50, solían interpretar papeles de malos o villanos, a ambos les ofrecieron el papel de James Bond en Agente 007 contra el Dr. No (1962), aunque ninguno acabara aceptándolo, y tuvieron una cierta relación con España.

Baker tenía una casa de veraneo en la Costa del Sol, donde enfermó de neumonía, muriendo en Málaga y Boyd rodó en los años 70 algunas películas íntegramente españolas.

Aunque realmente con el que se le saca más parecido, sobre todo físico, es con el actor australiano Rod Taylor, también contemporáneo de ambos.


Emergió durante los años cincuenta, cuando los protagonistas increíblemente guapos, atractivos y románticos eran casi de rigor.
Para esos tiempos, era un potencial actor principal que se proyectaba fuertemente contra la corriente. Baker demostró de inmediato una presencia única en la pantalla: dura, arenosa, combustible, y poseía un aura de poder oscuro e incluso amenazante.

Stanley Baker provenía de una ruda población minera galesa (lo cual resulta una gran conexión con su papel en esta película), y cuando era niño era rebelde, rápido para estallar y el primero en pelear.

El cine acogió al Baker adulto como la encarnación del mal. 
Sus primeros trabajos importantes dieron al actor papeles enérgicos y antipáticos como en

El hidalgo de los mares (1951) 
Mar cruel (1953)
Infierno bajo cero (1954) 
La dinastía del petróleo (1957)
Los caballeros del rey Arturo (1953)
Helena de Troya (1956)

A pesar de nunca haber sido elegido como un protagonista romántico y de estar asociado casi por completo con papeles de villano, Stanley Baker se convirtió en una estrella a fuerza de su poderosa personalidad.

Además de estas trabajo en otras muy buenas películas como Los cañones de Navarone, Sodoma y Gomorra o Zulú, teniendo unos cuantos trabajos en películas sobre África.

Entre sus directores predilectos estaban Cy Endfield y Joseph Losey, aunque también repitió con el director de esta película, Ralph Thomas.
Rechazó muchas ofertas de Hollywood durante la década de 1950 porque quería mantener en marcha la industria cinematográfica británica.

Aunque lamentó no haber aceptado el papel de James Bond, Baker era amigo y admirador abierto del trabajo de Sir Sean Connery en el papel, como admirador era de Anthony Quinn, el que le parecía uno de los mejores actores durante su época y en el que se fijaba y aprendía.

Nombrado caballero en 1976, era evidente que Stanley Baker bien podría haber continuado a mayores alturas, tanto como actor como productor, pero sucumbió al cáncer de pulmón y murió a la temprana edad de cuarenta y ocho años. Pero su legado es incuestionable.  
Estableció su propio modelo como actor contento de ser admirado por retratar sin igual a los de mala reputación y los antipáticos. 
Siempre ha habido legiones de protagonistas viriles y encantadores aparentemente intercambiables que pueblan las películas, pero Stanley Baker estuvo casi solo en su determinación de ser caracterizado y juzgado retratando los aspectos más sombríos de la condición humana.


Tuve dudas a la hora de que película ver, porque aunque he visto bastantes suyas, seguía habiendo varias que me apetecía, pero esta parecía atraerme más.

Y no me equivoqué.

Una película de aventuras, ambientada en Canadá (a pesar de que el rodaje se hizo íntegramente en los Dolomitas italianos), con ciertos aspectos también de western, y con un guión y algunos detalles del argumento exclusivos, que no había visto en otras películas.

Compartió protagonismo con Dirk Bogarde, al que se le consideraba totalmente opuesto a Baker, y con el que volvió a coincidir en Accidente (1967).

Esperaba encontrarme algo parecido a En busca del Oro (1938), que ya vi como homenaje a Olivia de Havilland, sólo que cambiando el protagonismo del oro por el petróleo, y con semejanzas, ésta película la mejoró.








Valoración:                                 8/10














01 marzo 2022

Sin testigos (1975)

 




Después de un fin de semana muy baloncestístico, con la Copa del Rey y el All Star de la Nba, me apetecía ver una película en torno al baloncesto, y tenía esta apuntada.

Aunque como cabía la posibilidad, el baloncesto realmente es algo casi residual, está ahí flotando en el argumento, pero apenas se ven dos o tres escenas jugando. Y es que me es difícil encontrar una película sobre este deporte en el que realmente se le dé un poco más de protagonismo, porque a día de hoy si me preguntas por baloncesto en el cine, lo relaciono con comedias tirando a cutres y de poco interés, y lo que más asocio es, evidentemente Space Jam, aunque no me gusta, De pelo en pecho, donde si que hay un interesante partido de baloncesto, o Los blancos no la saben meter.

Por ejemplo en fútbol, me parece que está mucho más conseguida una película que siempre ha estado entre mis favoritas, Evasión o Victoria.



Aquí una lista de películas de baloncesto a la que tendré que echar un vistazo a ver si rescato algo más interesante.





Así que me quedó una película del género Blaxploitation, aunque no la típica de acción con Fred Williamson o Jim Brown, si no un drama con otros actores de raza negra importantes como Moses Gunn o Bernie Casey y etiquetado en los títulos de crédito como "introducing", o sea debutando podríamos decir, Laurence Fishburne, acreditado como Laurence Fishburne III.


No es muy habitual hoy en día que los actores famosos hayan tenido ya alguna actuación cuando son casi niños, cosa que era más habitual en la época clásica de Hollywood, si no que debutan ya siendo mayores de edad después de estudiar actuación.

En cambio Fishburne a la edad de 10 años apareció en su primera obra,  en un teatro pequeño y estrecho en Manhattan. Presentándose a sí mismo como Larry Fishburne durante esta fase inicial, nunca estudió ni se formó en la técnica de la actuación.

A los 14, Francis Ford Coppola lo eligió para Apocalypse Now (1979), que filmó durante dos años en Filipinas. Laurence no trabajó durante otro año y medio después de este largo episodio. Coppola quedó lo suficientemente impresionado con Laurence como para contratarlo nuevamente, con papeles destacados en La ley de la calle (1983), Cotton Club (1984) y Jardines de piedra (1987).

Llegando en los 90 quizás su época de mayor éxito, con tres películas especialmente, Los chicos del barrio, Fugitivos encadenados y Matrix.


Algunos investigadores consideran que la trama de esta película es similar a los tiroteos y muertes de afroamericanos en la vida real a manos de las fuerzas del orden que el movimiento Black Lives Matter ha expuesto recientemente como racismo sistémico cuando se trata de afroamericanos. 
El tiroteo y la muerte de Trayvon Martin en 2012, muchos años después del estreno de la película, se considera muy parecido al argumento de esta película.









Valoración:                                 6/10